Derribo. Escuelas como la Miguel Alemán (en la imagen) podrían ser derribadas con el nuevo proyecto vial para la zona norte de la capital; este se extenderá por los patios del ferrocarril una vez que sean reubicados.
El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) no tiene ingerencia en los inmuebles que pretende derribar el Gobierno Estatal, tanto el "Mercadito" como las escuelas primarias Miguel Alemán y Elena Aguilar Medina, pero no permitirá el derribe de la vieja estación del ferrocarril, señaló el delegado Alberto Ramírez Ramírez.
El titular de la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas del Estado (Secope) anunció el derribe del inmueble conocido como "El Mercadito" para continuar con la Vialidad Par Norte, y la posibilidad también de echar abajo las tres instituciones educativas que se encuentran en la misma zona.
Ante esto, el delegado del INAH señala que en el caso del mercado y estación de bomberos, ahí no hay ningún problema porque su edificación no es vieja, por lo que no existe ingerencia alguna del INAH en su demolición.
De las dos escuelas primarias y el jardín de niños, comenta Ramírez Ramírez, su edificación data del año 1937 por lo que no entra, de acuerdo a la ley, en la protección de la delegación que preside, sino del Nacional de Bellas Artes (INBA).
La ley establece que inmuebles construidos del año 1899 para atrás, están bajo protección del INAH y de esa fecha para adelante, la protección recae en el INBA, por lo que "de acuerdo a la ley no nos toca la protección de las escuelas", comenta.
LA VIEJA ESTACIÓN DEL FERROCARRIL NO SE TOCA
No así en el caso de la vieja Estación del Ferrocarril, la cual, asegura, fue construida en el año 1892 y por ley entra en la protección del Instituto Nacional de Antropología e Historia y no podrá ser derrumbada.
La nueva estación fue construida en 1937 por lo que todos los trabajos de remodelación que se hicieron fueron bajo supervisión y autorización del INBA.
"Pero hasta donde nosotros tenemos entendido, no existe ningún proyecto para derrumbar la vieja estación la cual ya sufrió una remodelación después del incendio que sufrió en la administración de Guerrero Mier", pero aclaró el delegado del INAH que esa vieja estación "no se toca".
Ni planes
INBA
INAH
Nadia avila / El Siglo de Durango