Lee María Esther Esquivel palabra de Dios ante el Papa
Por: Fco. Manuel Álvarez Guevara.
María Esther Esquivel Tejeda está emocionada y convencida de que recibió un regalo de Dios.
Ella será la leonesa encargada de leer la primera lectura en la misa que presidirá Benedicto XVI en el Parque Bicentenario, ante al menos 600 mil personas.
La leonesa de 56 años tendrá una oportunidad que considera única: ser la vocera de la palabra de Dios en la misa de la primera visita de un Papa a Guanajuato.
Una prueba de lectura en el templo Expiatorio ante el sacerdote Jesús Salazar, le abrió la posibilidad de ser uno de los pocos que estarán tan cerca del Papa Benedicto XVI durante la misa en la Expo.
Son 143 palabras las que la señora Esther, vecina de Los Limones, leerá en presencia del Papa, un fragmento del libro del profeta Jeremías.
Además de ensayos arduos, tomó un diplomado en Teología y un curso de Liturgia, los que le han permitido mantener la tranquilidad frente al micrófono, ahogando un poco la inmensa emoción que le da estar en la misma misa que el Papa.
“Es una emoción indescriptible, algo que no puedo contar, pero simplemente es un acto que quiero hacer con todo el corazón, porque es un verdadero honor para mí ser partícipe de la difusión de la palabra de Dios en todos los templos, aunque éste es verdaderamente especial porque estará ahí Benedicto XVI”, dijo mientras vendía cirios en el atrio del templo de San Pío X, donde tiene 20 años contribuyendo en la pastoral.
Y no le cuesta trabajo dar una descripción de lo que leerá en la misa.
“La lectura habla sobre la alianza que harán el pueblo de Israel y Dios, Jeremías describe con toda ternura que Dios nos va a perdonar los pecados, ahí nos dice que todos conoceremos a Dios, ‘todos me van a conocer’”.
Además complementarán la liturgia de la palabra un seminarista y el sacerdote José Guadalupe Plascencia.
Explicó que la invitación le llegó directa del señor cura de San Pío X, Eduardo Contreras, luego ella se dirigió con el padre Jesús Salazar para que él mismo le hiciera la prueba.
“Luego ya, la hice y ya, pensé que ni me iban a hablar, pero el viernes me avisaron y estoy sumamente emocionada”.
“Para mí significa lo máximo, es como un sueño, es algo hermoso proclamar la palabra de Dios ante una personalidad tan importante como es el Papa”, dijo con emoción María Esther.
Como experiencia tiene 20 años apoyando en San Pío X, donde además se desarrolla como monitora en las misas de la mañana.
La primera vez que hizo una lectura en un templo fue en La Merced, parroquia a la que pertenece ya hace casi 30 años.
Emitirá sus plegarias en el altar
María Esther tiene una responsabilidad grande y la asume, y además tratará de darse un tiempo para emitir un par de plegarias en el altar donde estará Benedicto XVI.
“La más grande e importante para mí es la paz, pediré con todo mi corazón a Dios que nos permita desarrollarnos en un ambiente de paz y de armonía entre nosotros, que las familias puedan encontrar un momento de paz y de desarrollo y que se encuentre la prosperidad que se necesita para que nuestro País sea lo que será”, comentó.
Como madre de familia y una persona comprometida con su fe, dedicará otra petición a las mujeres, por quienes quisiera pedir para que no sufran el maltrato de sus maridos, el desinterés de las autoridades y la desdicha del fracaso.
“Voy a pedir porque se elimine ese poco valor que muchos hombres nos tienen, a muchas mujeres nos hace falta dignidad, pediré porque la recuperemos, para transmitirla a nuestros hijos, que muchas mujeres que la hemos perdido la recuperemos y tengamos el valor que merecemos en la sociedad y en la familia”, dijo.
El más íntimo de sus momentos y quizá la plegaria más importante la quiere dedicar a la familia, y la de ella está compuesta por sus tres hijos: Luis Abraham, Hugo Enrique y Eduardo Francisco, además por sus cuatro nietos: Andrea, Patrick, Malinali y Jimena.
“Deseo paz y salud en mi familia”, concluyó.