Oswaldo Sánchez fue el encargado de levantar el trofeo de campeones. (Fotos de Enrique Terrazas y Jesús Galindo)
Oswaldo Sánchez rompió en llanto cuando alzó la Copa de campeón, el guardameta no pudo contener sus emociones y levantó el ansiado trofeo que se les había negado en tres ocasiones, mientras que jugadores, cuerpo técnico y directivos festejaban a lo grande el título conquistado.
Fue una noche inolvidable para los Guerreros, que al subir al podium de los triunfadores lo hicieron por el apretado pasillo formado por los jugadores del Monterrey, que minutos antes habían recibido el trofeo de subcampeón y su respectiva medalla de manos de Decio de María, secretario general de la Federación Mexicana de Futbol, en representación de Justino Compeán, presidente de la Femexfut, quien no asistió a la ceremonia de premiación.
Los primeros en subir al podium fueron el colombiano Carlos Darwin Quintero y el panameño Felipe Baloy, llevando consigo la bandera de su país natal.
En medio de una fiesta de pirotecnia y una cancha tapizada de trozos de papel verde y blanco se hizo la entrega el trofeo de campeón al capitán Oswaldo Sánchez, quien no pudo contener el llanto y levantó al cielo la Copa para agradecer a Dios el título conquistado.
Acto seguido los demás jugadores tomaron el trofeo para admirarlo, mientras que el coro de ¡Oe, Oe! se escuchaba por todo el estadio.
Los jugadores festejaron el campeonato con sus familiares y enseguida dieron la vuelta olímpica por el nuevo Estadio Corona entre las aclamaciones del público, que permaneció en el inmueble hasta que la ceremonia de premiación concluyó, pues no quiso perderse el festejo.
Fue una noche redonda para Oswaldo Sánchez, que ayer jugó su partido número 630 en el futbol mexicano entre Liga y Liguilla, igualando la marca de Miguel España, ex jugador de Santos Laguna. Oswaldo se coloca ahora en cuarto lugar de la lista de jugadores con más partidos jugados en el futbol mexicano.
En cuanto a Liguillas, Oswaldo Sánchez jugó anoche su partido número 82 y es el jugador con más partidos de Liguilla en nuestro futbol, marca que ostenta desde el torneo anterior.
El festejo de la conquista de la cuarta estrella duró cerca de hora y media en el Estadio Corona, mientras que en calles y avenidas de las Tres Ciudades Hermanas empezaba la fiesta de un campeonato que era esperado desde hace dos años, cuando los Guerreros estuvieron cerca de conquistarlo en el Bicentenario 2010 contra Toluca.
La Comarca Lagunera no durmió anoche, sus habitantes viven de nueva cuenta la euforia de un campeonato y la alegría de romper la maldición del superliderato y anoche se convirtió en el tercer equipo que siendo superlíder es campeón del futbol mexicano.