Tendencia. En julio llovió más que el promedio histórico, por lo que se espera que las condiciones climáticas se mantengan igual.
De acuerdo con el informe de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), el acumulado de lluvias promedio en el estado fue de 144 milímetros, lo que representa un 123 por ciento más, en relación al promedio histórico para el séptimo mes.
Se estima que en los municipios en los que ha llovido más son los que están ubicados en el Centro de la entidad, e incluso en Hidalgo y Mapimí hay áreas en donde el acumulado es del 300 por ciento arriba del promedio.
En contraparte, hay municipios en donde ha llovido por debajo del 85 por ciento, como Simón Bolívar, Santa Clara, San Juan de Guadalupe, parte de Nombre de Dios, la mitad del municipio de Durango y algunos de la Sierra.
En las cuencas de las presas Guadalupe Victoria y Santiago Bayacora ha llovido un 75 por ciento respecto al promedio para el mes de julio, razón por la cual aún no han tenido una captación importante por escurrimientos.
De acuerdo con los datos de la Conagua, desde los primeros días de julio se comenzaron a presentar precipitaciones significativas en distintos puntos de la entidad casi a diario, por lo que durante los primeros 15 días del mes ya se había acumulado un 63 por ciento, respecto al promedio histórico.
COMPARATIVOS
La lluvia ha estado presente en la mayor parte de la entidad, a excepción de los días 6, 8, 9, 17,21, 22 y 24 de julio, en los que sólo se registraron algunos eventos aislados.
Pero la dependencia Federal también indica con precisión que los días 12, 21 y 28 de julio fueron los que presentaron una mayor precipitación, siendo el último de los referidos el que ocasionó mayores problemas en la ciudad de Durango y en el municipio de Cuencamé.
A pesar de que en junio ya comenzaban a presentarse algunas precipitaciones pluviales, dicho mes fue todavía irregular pues sólo llovió un 33 por ciento con relación al promedio histórico para dicho mes.
Aún así, el panorama ya comenzaba a pintar diferente con relación a 2011, que fue uno de los más secos según los antecedentes de los últimos 70 años, mismos que refiere Conagua.
Lo que causó mayores expectativas, sobre todo en el sector campesino, fue el hecho de que en el segundo mes del año ya se comenzaban a registrar algunas precipitaciones, incluso por arriba del promedio, situación que también se presentó en mayo.
