La cápsula Shenzhou-9 logró completar con éxito un acoplamiento manual con el módulo Tiangong-1, en órbita desde septiembre a 343 kilómetros de la Tierra, el primer intento de este tipo en la historia de la exploración espacial de China.
Los tres astronautas -Jing Haipeng, Liu Wang y Liu Yang, la primera mujer china en ir al espacio- demostraron que el país domina las tecnologías de encuentro y acoplamiento en el espacio y que pueden transportar personas y cargamento, esencial en la construcción de una estación espacial, destacó la agencia Xinhua.
Aproximadamente una hora y media antes del acoplamiento, Shenzhou-9 y el módulo de laboratorio orbital Tiangong-1 se separaron, situándose en el punto de atraque a 400 metros de distacia entre ambos.
Los ingenieros habían establecido cuatro puntos de atraque para la nave espacial, a cinco kilómetros, 400 metros, 140 metros y 30 metros, respectivamente, del laboratorio orbital para dejar espacio para el ajuste.
La nave y el módulo fueron ensamblados por un acoplamiento automático el 18 de junio. Shenzhou-9 fue enviado al espacio el 16 de junio desde un centro de lanzamiento en el desierto del Gobi en el noroeste de China.