Algunas señales del lupus son afectaciones en la piel como enrojecimiento y erupciones y dolor e inflamación en las articulaciones. ARCHIVO
El lupus es una enfermedad reumática, crónica e inflamatoria, puede ser grave y afectar varias partes del organismo, en especial articulaciones, músculos, piel y riñones.
Esta enfermedad puede presentarse en menos de 1% de la población en México, siendo el porcentaje de afectados en promedio de 0.5% a 0.7% de la población adulta y jóvenes, aunque también hay casos de niños.
Es una enfermedad que tiene mayor prevalencia en mujeres que en hombres en edad productiva (de 20 a 40 años de edad), nueve mujeres afectadas por un hombre; también tiene mayor presencia en mujeres mayores de 50 años que en hombres de esas edad.
El lupus es una enfermedad que en un principio puede presentar diferentes síntomas como intolerancia al sol, fatiga, cansancio, plaquetas y glóbulos rojos bajos, anemia, fiebre, pérdida de peso de forma inexplicable, cambios de temperatura corporal y caída de cabello.
En primera etapa se puede detectar por exámenes de orina y sangre, y posteriormente se requieren otros estudios complementarios.
El tratamiento contra el lupus se basa en la utilización de cortisona y en ocasiones de quimioterapias, todo depende del grado de avance de la enfermedad y afectación en los órganos”.
Hasta 90% de los pacientes con lupus padecen dolor e inflamación en las articulaciones de manos, muñecas, codos, rodillas y pies.
También es posible que aparezca rigidez articular por las mañanas, así como afectaciones en la piel, la lesión más conocida, pero no la más frecuente es la denominada eritema en alas de mariposa, que consiste en un enrojecimiento y erupción de la piel en las mejillas y nariz, que semejan una especie de antifaz rojizo en forma de mariposa.
Ante los primeros síntomas debe evitarse la automedicación, acudir con un reumatólogo y realizarse los exámenes pertinentes.