Apoyo.Madres centroamericanas le piden a la Virgen de Guadalupe reencontrarse con sus hijos.
Las madres centroamericanas que recorren México en busca de sus hijos desaparecidos visitaron ayer domingo la Basílica de Guadalupe para orar por el regreso de sus hijos.
Las mujeres de varios países de Centroamérica que participan en la caravana "Liberando la esperanza" acudieron a misa en la basílica con fotos gigantes de sus hijos colgando de su cuello y portando banderas de Nicaragua y Honduras con las que atravesaron el atrio de la Iglesia.
"Bienvenidas las madres de Centroamérica. Pedimos a Dios que encuentren a sus hijos", dijo el sacerdote durante la celebración.
Después de la misa las mujeres hicieron un recorrido por la basílica, el sitio de peregrinación católica más visitado del continente.
María Eugenia Barrera Rocha, una de las 38 madres que durante 15 días han recorrido ciudades mexicanas en busca de sus hijos secuestrados o desaparecidos en muchos casos mientras cruzaban el país para llegar a Estados Unidos, pidió encontrar a su hija a la que no ve desde hace 10 años.
"Hay una nueva esperanza andando en la caravana, porque comencé buscando a mi hija sola, tuve muchos peligros... espero poder encontrarla para que vea a sus hijas gemelas de 11 años, que me quedaron de 11 meses", dijo Barrera Rocha después de la misa dominical. Su hija Clementina del Carmen Lagos Barrera salió de su casa en Chinandeja, Nicaragua, a hacer un mandado y nunca regresó.
Su madre dice que le han llegado noticias de que estaba en Guatemala y más tarde en una casa de citas en México, donde presuntamente la tendrían sometida.
"Las personas que la tengan no nos la queremos llevar, sólo quiero verla y comunicarme con ella", dijo antes de seguir con su recorrido.
EMA DA ESPERANZA
Sin importar el cansancio, a sus 76 años de edad, la hondureña Ema, quien participa en la Caravana de madres centroamericanas de hijos de migrantes, dice que es un claro ejemplo de la esperanza de este movimiento porque hace dos años ella encontró a su hija tras 20 años de no saber de ella.
Desde 2001, Emita, como la conocen las integrantes de esta caravana, sigue siendo parte del movimiento a pesar de que ya no busca a su hija, en 2010 durante su recorrido por la ciudad de México acudió a la Basílica de Guadalupe, pidió a la Virgen una señal de que su lucha por encontrar a su hija no era en vano y que la esperanza existe.
Con un rosario en la mano, cansada de varios días de caravana por diversos estados de la República, parada frente a las vías del tren en Lechería, Tultitlán, relató que en el 2010, "el 6 de noviembre fue cuando encontré a mi hija, después de 20 años que salió de Honduras, cansada de la pobreza y las injusticias".
Diputada propone reunión con madres
La presidenta de la Comisión de Asuntos Migratorios de la Cámara de Diputados, Amalia García Medina, propuso un encuentro con madres y esposas de migrantes centroamericanos, así como con los líderes y activistas que apoyan a ese sector.
Precisó que buscarán reunirse con la caravana de madres y esposas de centroamericanos desaparecidos en México, con los embajadores de Guatemala, Honduras, El Salvador y Nicaragua, así como con el padre Alejandro Solalinde y el obispo Raúl Vera para "expresarles nuestra solidaridad".
En un comunicado, la diputada del Partido de la Revolución Democrática (PRD) afirmó que la comisión que preside será un espacio de respaldo, cobijo, apoyo y solidaridad a la causa de los migrantes nacionales o extranjeros.
"Hemos decidido darles nuestro respaldo, además de acercarnos y solidarizarnos de manera inmediata y reclamar a los gobiernos estatales y federal que garanticen total y plenamente esa seguridad a todos los que cruzan por nuestro país", expresó.