La columna pasada comentamos nuestra postura sobre la llamada "Ley SOPA", propuesta legislativa que de hecho el viernes antepasado fue retirada del Congreso de los Estados Unidos, ante las presiones mundiales, y cuyo propósito era atacar la piratería en Internet, al menos en papel. De acuerdo a sus detractores, el propósito era vulnerar la libertad de expresión. En resumen, en la opinión de su servidor, SOPA es un buen bosquejo de lo que debe ser la ley que ataque la piratería en Internet, pero que para no vulnerar las libertades más elementales, debe pulirse, pues por ningún motivo debe permitirse a las autoridades que actúen de manera arbitraria. Esta semana que acaba de concluir, el viernes 26 de enero, para ser más exactos, la Unión Europea y 22 de sus países miembros firmaron el Acuerdo Comercial contra la Falsificación, más conocido como ACTA (Anti Counterfeiting Trade Agreement, por sus siglas en inglés), en resumen, el acuerdo faculta a las autoridades de los países firmantes a limitar el acceso a Internet a los cibernautas que descarguen material con propiedad intelectual, sin autorización del autor ó dueño de los derechos de propiedad intelectual correspondientes; esto, luego de haber recibido 2 "advertencias", para lo cual los proveedores de Internet tendrían que proveer a las autoridades de información personal de sus clientes. El día en que ACTA fue firmado, se lanzaron ataques cibernéticos contra el portal de Internet del Parlamento Europeo. El Acuerdo ha sido firmado por todos los países miembros de la Unión Europea, excepto por Holanda, Chipre, Estonia, Alemania y Eslovaquia, debe ser ratificado por el citado Parlamento en Junio y ya ha sido firmado por países como Estados Unidos, Canadá y Japón. Los detractores de ACTA argumentan que con dicho Tratado se vulnera la libertad de expresión, ya que se vigilarían los contenidos en Internet. En lo personal, tal y como lo manifesté la semana pasada, creo que es urgente y necesario atacar la piratería descarada que se da en Internet. Respecto de las críticas de los detractores, creo que Internet ya es vigilado por la autoridades, por lo que creo que eso no cambiaría, ahora bien, las sanciones contempladas por ACTA sólo se aplican a quien descargue material que cuente con propiedad intelectual, y que lo haga sin autorización de quién posee los derechos de la obra en cuestión (canción, videojuego, película, etc.), por lo que francamente no encuentro la merma a la libertad de expresión. Lo más fácil es unirse a los millones de usuarios que están en contra de SOPA y ACTA; en lo personal, los invito a informarse al respecto y a crear su propio criterio. Cierto, no podemos ni debemos permitir que se vulnere la libertad de expresión, pero al menos en ACTA no creo que sea el caso, y sí, es necesario y urgente que se ataque la piratería en Internet. Recuerden que al fomentar la piratería en cualquier aspecto, fomentamos también a la delincuencia. Pero ésa, es mi opinión... hasta la próxima!!!
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