Saúl Villar Domínguez fue sentenciado a pasar 40 años tras las rejas, además de que tendrá que pagar una multa de 700 días de salarios mínimos, tras ser hallado culpable de encabezar el asesinato de la madre de su concubina.
El crimen ocurrió el pasado 11 de junio de 2011, al interior del domicilio de la víctima, ubicado en el Fraccionamiento Fuentes del Valle, municipio de Tultitlán, donde el sentenciado y su esposa, Mónica Guadalupe Orta Chimal, fueron capturados.
De acuerdo a los hechos, el día del homicidio, Villar Domínguez y Orta Chimal, yerno e hija respectivamente de la hoy occisa, discutieron con ella y le reclamaron el hecho de que sólo hubiera comprado zapatos a una de sus nietas y no a las dos.
La agraviada, molesta, se retiró a su habitación, sitio hasta donde la siguió el sentenciado e inmediatamente la tomó del cuello para asfixiarla; posteriormente, Villar Domínguez pidió ayuda a su esposa, quien le proporcionó una cuerda con la que también ahorcó a su víctima, además de que la golpeó en diversas ocasiones.
Finalmente, el sentenciado la degolló con un cuchillo y junto con su esposa, trasladó el cuerpo hasta la planta baja del domicilio, donde había una excavación; ahí arrojaron el cuerpo, lo taparon con tierra, costales y cal, y prepararon mezcla con cemento y grava para tapar la fosa.
En tanto, la hija de la víctima lavó el cuchillo y pisos del inmueble para borrar toda evidencia e indicios del feminicidio.
Con las pruebas reunidas y asentadas en la carpeta de investigación 493510360127911, personal de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México presentó a los involucrados ante el Juez competente, quien en su momento los vinculó a procesos y dictó la sentencia a Villar Domínguez. La hija de la víctima se encuentra en proceso.
