HISTORIAS DE LA CREACIÓN DEL MUNDO
¡Qué hermoso el mundo que creó el Señor! Cada una de sus obras era un prodigio, una maravilla: el mínimo colibrí, la enorme estrella, la ondulante amiba, la graciosa gacela, el noble caballo, la sinuosa pantera, el femenino gato, la cantora ballena... Y luego las lujuriosas flores, y los umbríos árboles, y los móviles ríos inmóviles, y el mar que no requiere de adjetivos... Todo era bello, todo era deslumbrante.
Pero pasó el tiempo, y un día el Señor le ordenó a Noé:
-Haz un arca de madera, de 300 codos de longitud, 50 codos de anchura y 30 codos de altura, con una ventana y una puerta.
Y dijo para sí Noé:
-Se acabó la creación de Dios. Ahora sigue la ingeniería.
¡Hasta mañana!...