Caín era muy malo.
Abel, en cambio, era muy bueno. Tan bueno era que ni
siquiera se daba cuenta de que había en elmundo gente mala.
Ese es el mayor problema de los buenos.
Cierto día Caín se levantó contra su hermano y lo mató.
Con una quijada de burro lo golpeó hasta quitarle el
aliento de la vida. Lo hizo por envidia, por pura maldad,
pues Abel no le había hecho ningún daño.
-¿Por qué mataste a tu hermano? -le preguntaron espantados
Adán y Eva-. ¿Por qué lo golpeaste con esa quijada?
Los malos, ya se sabe, culpan siempre de su maldad a
otros. Respondió Caín:
-Dios tuvo la culpa. Fue él quien hizo al burro.
¡Hasta mañana!...