Moody's condiciona calificación al país

La implementación de las reformas estructurales pendientes, así como el aumento de crédito bancario y la competitividad, son elementos indispensables para aumentar la calificación crediticia de México, señaló Moody's.

Desde finales del sexenio anterior, la nota crediticia del País permanece en "Baa1", que es un nivel estable, sólido y de grado de inversión, mencionó Mauro Leos, analista de riesgo soberano de México; sin embargo, otros países de América Latina la han alcanzado.

En los últimos seis años, Colombia, Perú, Uruguay y Brasil aumentaron su calificación crediticia para llegar también al grado de inversión que tiene actualmente México, subrayó.

En ese periodo, explicó, los países de la región realizaron reformas que permitieron a sus economías crecer de forma mas sólida y constante.

México ya había realizado dichos cambios con anterioridad, subrayó, por ello la calificación del país fue muy superior a la del resto de los países latinoamericanos, aunque ahora el efecto de esas reformas ha pasado y no se han hecho modificaciones recientes al esquema económico.

Leos destacó que las reformas estructurales permitirán que la calificación de México pueda subir a "A3", en donde están países emergentes con ingresos más sólidos y crecimientos económicos más vigorosos.

Además de las reformas, el país cuenta con elementos de fortaleza como una buena resistencia a las crisis, tal y como se mostró en 2009, y un crédito bancario que comienza a repuntar.

Asimismo, poco a poco la brecha de competitividad entre México y China se ha cerrado y eso ha vuelto más atractivo al país para los inversionistas.

Además, Moody's consideró que el historial crediticio mexicano es bueno, cuenta con políticas fiscales, monetarias y cambiarias previsibles y no hay demasiados sectores en donde haya booms temporales, que luego deriven en caídas estrepitosas.

No obstante, hay varios elementos que entorpecen todavía un aumento en la calificación.

El primero de ellos, señaló Leos, es la dependencia de los ciclos económicos de Estados Unidos y del petróleo para los ingresos fiscales.

Hay todavía un bajo crecimiento económico, añadió, y existen varias interrogantes políticas respecto de la postura de algunos partidos políticos, principalmente el Partido de la Revolución Democrática (PRD) respecto a diversos temas, incluidos los económicos. A pesar de lo anterior, la calificadora se mostró confiada de la estabilidad macroeconómica de México y de la posibilidad de establecer políticas publicas novedosas en el arranque del nuevo sexenio, mismas que finalmente permitan elevar la calificación crítica del país.

Tiempo de reformas: Carstens

El gobernador del Banco de México (Banxico), Agustín Carstens, advirtió que existe un buen ambiente para sacar adelante las reformas estructurales que potenciarían el crecimiento económico de México.

Las reformas fortalecerían la plataforma que se construyó en los últimos años, se reforzó en la administración del presidente Felipe Calderón y debería utilizarse como trampolín para aspirar a tasas de crecimiento más altas, de niveles de 6.0 por ciento, destacó al participar en la 13 Conferencia Anual de la calificadora Moody's.

"La mesa está puesta desde el punto de vista macroeconómico, para que con medidas estructurales ya más de carácter microeconómico se potencie el crecimiento económico de nuestro país, y para mí es alentador de que tanto la administración saliente como la entrante están haciendo todo un esfuerzo para llegar a esas reformas", aseveró el banquero central.

Asimismo, destacó que también "es muy alentador el ambiente que se respira en el Poder Legislativo y en la administración entrante para promover esas reformas estructurales, sería muy alentador que se aproveche el tiempo para aprobar incluso estas iniciativas de carácter preferente que mandó el presidente Calderón".