Consumo. En Durango niños y adultos toman elevadas cantidades de refresco al día, porque es más cómodo que preparar una jarra de agua de frutas, que a la larga, sale más barata y más sana.
El consumo de refresco en el estado se ha elevado de forma significadiva, sobre todo en la niñez, a tal grado que es uno de los factores principales que llevan a la obesidad y dabetes, señaló Eduardo Díaz Juárez, Secretario Técnico del Sector Salud.
"Con el hecho de consumir un refresco, ya estamos ingiriendo un elevado número de calorías; pero si lo ligamos que no tomamos sólo uno al día, sino dos o tres, y a esto le sumamos la vida sedentario que llevan muchos menores y adultos, entonces estamos hablando de un serio problema", comentó el galeno.
MUCHO REFRESCO Y POCO EJERCICIO
Lamentó que entre los niños exista poca actividad física, que muchos lleguen a la casa y en vez de salir a jugar con la pelota o acudir a hacer ejercicio, prefieran sentarse a jugar videojuegos, a ver la tele o en la computadora.
"Este tipo de vida sedentaria, sumado a la gran cantidad de calorías que contienen los refrescos y a que las madres de familia acostumbran darles también algo de comida chatarra, les está dando una vida de muchos riesgos de salud", dijo el galeno.
Desconoció el nivel de consumo de refrescos que existe en Durango, pero a nivel internacional -indicó- México es de los primeros países consumidores de esta gaseosa en el mundo. Durango, relató, no es la excepción y su población es consumidora del mismo.
Las calorías que se consumen y que no se eliminan por la falta de actividad física, agregó el segundo hombre en el organigrama de la Secretaría de Salud, provocan el exceso de grasa que se va almacenando en el cuerpo humano y que al final llega a ser el sobrepeso y la obesidad.
Pero también manifestó que esas grasas y azucares se convierten en un problema porque llegan a generar varios más.
"Se vienen los problemas metabólicos y que a la larga provocan la diabetes a temprana edad, que esto ya es un serio riesgo para la salud. Entonces, lo que nos queda a todos los duranguenses, es ir eliminando los malos hábitos, entre ellos el consumo en exceso de los refrescos", comentó Díaz Juárez.