Un agente de la Patrulla Fronteriza murió baleado ayer martes, cerca de la frontera de Arizona con México, en lo que representó el primer ataque fatal contra un miembro de esa dependencia desde que un tiroteo con delincuentes mexicanos en 2010 derivó en que el Congreso investigara una fallida investigación de contrabando de armas hacia el sur de la línea limítrofe binacional.
El agente y un colega realizaban un patrullaje en el desierto, cerca de Naco, Arizona, alrededor de la 1:50 a.m. MST (0850 GMT) del martes, cuando comenzó el tiroteo, informó la Patrulla Fronteriza.
El agente lesionado fue aerotransportado a un hospital con heridas de bala en un tobillo y una nalga, según la Patrulla Fronteriza.
El tiroteo ocurrió después de que se activó una alarma en uno de varios sensores instalados en la frontera.
Los tres agentes acudieron a investigar, dijo Carol Capas, vocera del jefe policial del condado de Cochise.
Se desconoce si los agentes respondieron a los disparos, señaló la portavoz. El último agente de la Patrulla Fronteriza que había muerto en servicio fue Brian Terry.