El estado de Nuevo León lidera la lista. (El Universal)
418 personas han muerto en masacres por pugnas entre grupos rivales del crimen organizado en el país de 2011 a la fecha. Los estados donde más se han registrado asesinatos de este tipo son Nuevo León y Veracruz; le sigue Tamaulipas, luego Jalisco y finalmente Chihuahua.
Las bandas del crimen que se disputan el territorio para el trasiego de drogas, la venta al menudeo o la comisión de delitos como extorsiones son "Los Zeta"-"Milenio", "Nueva Generación" y Pacífico en Jalisco -aunque también se ha detectado la presencia de "La Familia Michoacana". En Nuevo León es el cártel del Golfo contra "Los Zetas"; mientras que en Tamaulipas son "Los Zetas" contra el cártel del Golfo y el del Pacífico, según la información que han difundido las procuradurías locales en estos hechos.
En Veracruz el Cártel del Pacífico entró a pelear territorio perdido de "Los Zetas" y el cártel del Golfo, de acuerdo con la Procuraduría General de la República (PGR).
La masacre de Caderyta, Nuevo León, donde 49 torsos fueron hallados en una carretera el 13 de mayo, en un principio fue atribuida por autoridades a "Los Zetas" en venganza a bandas rivales, según un mensaje dejado en el lugar, al igual que los nueve cuerpos colgados en Nuevo Laredo el pasado 4 de mayo.
Sin embargo, días después el vocero de Seguridad Pública del Estado, Jorge Domene, mencionó que las investigaciones seguían en curso y no se podía determinar la autoría de la masacre. Ayer jueves, autoridades federales ligaron al multicrimen a presuntos integrantes del cártel del Golfo.
Estas matanzas se concentran en cinco estados, y en este conteo no se incluyen los casos de cuerpos encontrados en fosas clandestinas en los que no se han relacionado los crímenes con pugnas entre bandas. Tal es el caso de Tamaulipas, donde en 2011 se hallaron más de 200 restos ligados a plagios en autobuses, o las más de 300 osamentas en Durango relacionadas con víctimas de secuestros, extorsión o pugnas, y que no fueron asesinados en un hecho.
En el caso de Jalisco y Veracruz, la mayoría de las matanzas se dio a conocer tras los hallazgos de decenas de cuerpos en vehículos abandonados o sobre vías públicas. En Chihuahua, las masacres han sido en bares ocurridas en la ciudad capital la mayoría este año.