Seis personas murieron hoy en Bosnia debido a las bajas temperaturas y la nieve, que no para de caer desde la pasada noche en casi todo el país balcánico, informó el portal bosnio "Sarajevo-x.com".
Cinco de las muertes se produjeron en Sarajevo, la capital del país, mientras que la sexta se registró en la ciudad de Mostar.
Según las autoridades sanitarias bosnias, algunos de los fallecidos murieron por el esfuerzo físico excesivo cuando limpiaban la nieve de las calles en la capital.
La nieve ha paralizado hoy casi todo el país balcánico, y ha impedido el trabajo de las escuelas en varias regiones.
Numerosas aldeas montañosas del ente serbobosnio de Bosnia están aisladas por la nieve.
En la vecina Serbia, debido a la nieve, ha aumentado desde ayer de 14 a 26 en número de municipios donde ha sido proclamada la situación de emergencia.
Desde el inicio del temporal han muerto seis personas en Serbia, mientras 11.500 personas en aldeas montañosas de difícil acceso siguen asiladas y unos 17.000 escolares no han acudido a clases por las malas condiciones meteorológicas.
En aras de prevenir problemas de suministro de energía, el Gobierno serbio pidió al Ministerio de Educación que "analice la posibilidad de suspender o reducir" el trabajo de las escuelas en los próximos días.
También, recomendó a los consumidores industriales "reducir el consumo al mínimo tecnológico, en conformidad con las posibilidades técnicas", y pidió a otros consumidores la "máxima racionalización" en el uso de energía y combustibles.
El consejero del primer ministro para la energía, Petar Skundric, declaró hoy, citado por la agencia de noticias "Tanjug", que el consumo de energía eléctrica ha llegado a su máximo histórico, con 160 millones de kilovatio-hora al día.
También, se ha reducido en dos millones de metros cúbicos el suministro de gas natural a Serbia por el frío, aunque por ahora eso no afecta a los consumidores, ya que la reducción se puede compensar con las reservas de la distribuidora nacional.
