Trabajo. Las mujeres indígenas son triplemente discriminadas por su sexo, origen y situación económica, por lo que se trabaja en acciones para igualdad de género, informó el IMD.
Son incontables las historias que diariamente muestran las condiciones negativas en las que se desarrollan los indígenas, tales como violencia intrafamiliar, escasez de alimentos, actos violentos relacionados con grupos delictivos y el crimen organizado entre otras.
El Instituto de la Mujer Duranguense (IMD) indica que hablar de grupos indígenas es abordar temas como la marginación y violencia, pero dentro de esta vulnerabilidad existe un grupo triplemente discriminado: las mujeres puesto que son maltratadas por el simple hecho de ser del sexo femenino, por su origen y por su condición y percepción económica.
Durante el pasado 10 de mayo la Organización de las Naciones Unidas (ONU), destacó que las mujeres, niñas, adolescentes y jóvenes indígenas son las más pobres de entre los pobres al ser victimas de un elevado aumento en la violencia política, social, económica, espiritual, física, sexual, psicológica y medioambiental, por lo que alertó a la comunidad internacional para intensificar los esfuerzos para terminar con esta "epidemia global".
SEÑALAMIENTO
Fátima del Rosario González Huizar titular del IMD, asegura que en Durango la situación no es diferente al reconocer que con la ola de inseguridad registrada en la localidad las agresiones hacia las mujeres indígenas han empeorado, "viven en condiciones de marginación, no cuentan con servicios de salud, y la educación es imperceptible, ya que debido a la violencia huyen de sus poblados olvidando documentos de identidad, simplemente, sentenciadas a vivir en situación de pobreza".