Secuestro. Una unidad perteneciente al Gobierno Federal fue severamente dañada por los estudiantes.
Un fuerte dispositivo policial, el cuerpo de Protección Civil, paramédicos de la Cruz Roja Mexicana y un helicóptero se observaban a gran distancia en la Escuela Normal Rural J. Guadalupe Aguilera la mañana de ayer, tras un enfrentamiento entre alumnos de la institución y elementos del grupo Antimotines de la Policía Estatal Preventiva.
Los hechos tuvieron lugar en el interior y exterior del plantel alrededor de las 9:00 horas de este martes y se derivaron del secuestro -por parte de estudiantes- de por lo menos siete vehículos oficiales de dependencias estatales y federales, como Sedesol y la Secretaría de Salud. Entre los automotores estaba también una pipa de Petróleos Mexicanos que se dirigía al municipio de Canatlán para descargar 20 mil litros de combustible, que amenazaron con incendiar si los cuerpos policiacos no se retiraban.
Tras el operativo, los jóvenes estudiantes denunciaron la falta de sensibilidad de las autoridades para tratar este tipo de conflictos, pues desde hace varios días el problema se tornaba difícil. El problema, según expresaron ellos mismo, recrudeció cuando autoridades resguardaron el plantel para evitar las "novatadas", de las que se quejaron varias familias en los días previos.
Ante ello, el sector educativo decidió retrasar una semana el inicio de clases a fin de evitar esos roces, tras las recomendaciones emitidas por la Comisión Estatal de Derechos Humanos.
INGRESO
Pocos minutos después de las 9:00 horas de este martes, sin llegar a un diálogo, los granaderos irrumpieron las instalaciones del plantel lanzando gas lacrimógeno, lo que provocó golpes con diferentes objetos. En la incursión resultaron heridos 30 alumnos, seis de ellos de consideración, por lo que fue necesaria la intervención de paramédicos. Más tarde, la Fiscal General del Estado reportó lesiones en ocho agentes estatales, aunque no se precisó la corporación a la que pertenecían.
En el enfrentamiento, los elementos policiales se llevaron detenidos a tres estudiantes y en las horas posteriores capturaron a nueve personas más, entre ellos padres de familia y catedráticos.
Pese a que las autoridades educativas y policiales declararon que el personal que se encontraba resguardando el plantel estaba desarmado, se observó que algunos de ellos portaban armas.
Los Antimotines y elementos de la Agencia Estatal de Investigación que se dieron cita en el lugar, además de sus toletes, portaban palos y tubos con los que encararon a los estudiantes y padres de familia durante los roces; hubo, incluso, palabras altisonantes, a lo que los quejosos respondían con gritos como: 'abusones', 'dejen libres a los estudiantes', 'corruptos' o 'mañosos'.
NEGOCIACIÓN
Cerca del mediodía, Arturo Galindo Cabada, director de Protección Civil del Estado, entabló un diálogo con los estudiantes, quienes accedieron a liberar la pipa de combustible si liberaba a los detenidos, acción que se concretó entre las 12:30 y las 13:30 horas; sin embargo en el momento de la negociación, cuando liberaban a seis de los detenidos, dos estudiantes más fueron sometidos violentamente por las autoridades.
Estos fueron liberados media hora después con muestras de maltrato e incluso sangraban, dos de ellos mostraban heridas en la cabeza.
En total fueron 10 personas liberadas de las 12 que fueron sometidas por los agentes estatales.
A los detenidos les fueron retirados sus teléfonos celulares, así como documentos personales.
Cerca de las 15:00 horas, una comitiva de 10 estudiantes se trasladaron a la ciudad de Durango a fin de entablar una mesa de diálogo con las autoridades estatales; sin embargo, tanto alumnos como padres de familia pedían a los medios de comunicación que no se retiraran del lugar, pues temían por su integridad.
Cabe destacar que hasta pasadas las 15:00 horas, solo fue el titular de Protección Civil se acercó a negociar la entrega de la pipa, al considerar que era un riesgo latente para los ahí presentes, pues además a 200 metros de la institución está instalada una gasolinera.
Declaración
Héctor Vela Valenzuela, Secretario de Educación en el Estado durante la mañana de este martes, aseguró que no se llegaría a un acuerdo, pues los estudiantes normalistas no son quienes deciden quien entra y quien sale de la institución.
Seguridad
Al rededor de 200 elementos policiales de diversas corporaciones de seguridad se dieron cita en el lugar de los hechos desde temprana hora de este martes.
Acuerdo
El pasao lunes 20 de agosto, padres de familia tuvieron una reunión con autoridades educativas, quienes aseguraron retirarían a los elementos policiales del lugar.
Padres
Durante el transcurso de la mañana, fueron llegando padres de familia provenientes de diversas localidades cercanas al plantel.
Denuncian irregularidades en el plantel
Los estudiantes denunciaron que desde el pasado viernes, por órdenes del director del plantel, Francisco Javier Reyes Solís, los proveedores de alimentos dejaron de suministrar los artículos que son preparados al interior de la cocina escolar, por lo que los jóvenes permanecían sin alimento desde el viernes 17 de agosto; sin embargo, mismos padres de familia suministran pequeñas cantidades de comida para los cerca de 300 jóvenes que permanecen dentro del plantel.
Los inconformes piden diálogo con las autoridades estatales a fin de que las clases sean reestablecidas de manera inmediata, aunado a ello buscan denunciar diversos abusos que se cometen al interior del plantel, tal es el caso del ingreso de manera ilícita de diversos jóvenes, pues en el escritorio del director encontraron una larga lista de jóvenes recomendados para ingresar a la institución, acción que repelieron, pues aseguran que "los lugares en la Normal de Aguilera se ganan; deben pasar el examen Ceneval, el estudio socioeconómico y la semana de inducción".
Cabe mencionar que los estudiantes se armaron con palos, tubos, machetes y demás artículos campiranos a fin de defenderse de las agresiones y arremeter contra los cuerpos policiacos que buscaban ingresar al plantel.