El gobierno argentino ofreció hoy sus condolencias a los familiares de las 49 personas que murieron en un accidente ferroviario en el centro de Buenos Aires y prometió una exhaustiva investigación para deslindar responsabilidades.
El secretario del Transporte, Juan Pablo Schiavi, fue el funcionario encargado de dar la cara en nombre del gobierno de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en una jornada de luto y de conmoción para los argentinos.
'Queremos ofrecer nuestras condolencias a las familias de las víctimas y bregar por la recuperación de todos los heridos', dijo Schiavi en una rueda de prensa en la que aclaró que hay 461 personas internadas, muchas de ellas en condiciones de gravedad.
Consideró que, además de tragedia, desgracia y luto, se debe hablar de responsabilidades y accidentes, por lo que se pondrán a disposición de la justicia todos los elementos que permitan aclarar la tragedia.
'El juez Claudio Bonadío va a encabezar una investigación penal, pero también hay un Estado presente y por eso estamos haciendo una investigación profunda en lo administrativo y técnico', dijo.
El secretario agregó que hay varios elementos para aportar a la investigación, como las cámaras que estaban en el interior del tren y las de la estación, además de las grabaciones de los contactos que el conductor tuvo con el encargado de la Línea Sarmiento.
'Material de investigación hay mucho, hemos puesto todo a disposición de la justicia, y en el tema de la responsabilidad vamos a hacer una profunda auditoría para saber que pasó', señaló.
Schiavi reconoció de manera especial el trabajo que realizaron todos los organismos involucrados en la tarea de rescate, ya que sin ellos, la desgracia hubiera sido peor.
Explicó que el conductor del tren chocado es un joven de 28 años, que también resultó herido y está en terapia intensiva, que cumplía su primer recorrido del día y que manejó con normalidad hasta que llegó a la estación Once, en donde se descontroló por falta de frenos.
