El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, condenó hoy el asesinato del secretario general de la Media Luna Roja en Siria, Abdul Razaq Yibiro, y pidió a Damasco que investigue el ataque y lleve a sus autores ante la Justicia.
"El secretario general condena el ataque en el que se mató a Yibiro, que estuvo dirigido contra un vehículo con el emblema de la Media Luna Roja claramente visible", aseguró ante la prensa el portavoz de Ban, Martin Nesirky, en la sede central de la ONU en Nueva York.
El máximo responsable de la ONU pidió al Gobierno sirio que investigue el crimen y que lleve a sus autores ante la Justicia, y recordó "a todos su obligación de respetar y proteger a los trabajadores humanitarios que cumplen con sus obligaciones y ayudan imparcialmente a quienes necesitan ayuda", dijo Nesirky.
Yibiro murió el miércoles por disparos de desconocidos cuando viajaba de Damasco a la ciudad de Idleb (norte), en un ataque del que las autoridades sirias responsabilizaron a "grupos terroristas", mientras que el grupo opositor Comités de la Coordinación Local (CCL) atribuyó los disparos a las fuerzas de seguridad.
La violencia continuaba hoy en Siria, donde al menos quince personas murieron, entre ellas cinco soldados desertores, por disparos de las fuerzas de seguridad y la ofensiva del Ejército en distintas zonas del país, según informaron los CCL.
Esta nueva jornada de violencia coincide con multitudinarias manifestaciones en varias ciudades de Siria en apoyo al régimen de Bachar al Asad y en rechazo a la hoja de ruta de la Liga Árabe, que estipula la renuncia del presidente sirio.
La iniciativa trazada por los países árabes el pasado domingo pide a Al Asad que transfiera sus poderes al vicepresidente y forme un gobierno de unidad nacional que dirija al país hacia elecciones libres.