El lagunero Oribe Peralta se convirtió anoche en el primer jugador de Santos Laguna en anotar cuatro goles en un partido de Liga en el nuevo Estadio Corona, igualando la marca de Eduardo Lillingston y Jared Borgetti. "El Cepillo'' regresó a la senda del gol y llevó a los Guerreros a un triunfo sobre Gladiadores por 5-2.
En el viejo Estadio Corona sólo dos jugadores habían conseguido anotar cuatro tantos en un encuentro oficial: Eduardo Lillingston en un partido contra Toluca en la última jornada del Apertura 2002, ganó Santos Laguna 5-2 y calificó a la Liguilla. Esa tarde Lillingston suplió a Jared Borgetti.
El segundo en anotar cuatro goles en un partido fue Jared Borgetti en un partido contra Tigres, que los Guerreros ganaron 5-0 en el Clausura 2003. La marca de Lillingston y Borgetti fue igualada anoche por el jugador nacido en La Partida, Coahuila.
Cuando Santos Laguna saltó a la cancha se escucharon pocos aplausos, la afición estaba resentida con los Guerreros y la entrada fue regular. El acceso al Estadio Corona no fue tan complicado como en otras ocasiones, los embotellamientos fueron mínimos y la gente llegó sin muchos problemas.
La afluencia de aficionados fue poco a poco y los que iban llegando al Territorio Santos Modelo apresuraron los pasos cuando estalló el grito de gol en las tribunas.
Habían transcurrido cinco minutos de juego corrido cuando Oribe Peralta rompió su racha personal de seis partidos sin anotar al aprovechar un pase filtrado de Christian Suárez para adelantar a su equipo en el marcador.
El arranque de los Guerreros fue a "tambor batiente'' y Oribe Peralta volvió anotar al minuto 17 y estalló de nuevo el júbilo en las tribunas, se había reconciliado el equipo con sus seguidores.
El ánimo de los aficionados fue en aumento cuando al minuto 21 fue expulsado Alfredo "El Chango'' Moreno, las cosas pintaban mal para San Luis que se quedaba con diez hombres, pero Santos Laguna se relajó y Gladiadores reaccionó.
César Ibáñez le regaló un penalty a los potosinos al minuto 26, el cual aprovechó Facundo Pereyra para acercar a su equipo en el marcador.
Al peruano Wilmer Aguirre le sienta bien el nuevo Estadio Corona y ayer anotó el del empate a dos para su equipo al minuto 40. La afición se molestó con el relajamiento de los Guerreros y cuando Daniel "El Hachita'' Ludueña salió de la banca para hacer ejercicios de calentamiento y fue abucheado.
La afición no podía ocultar su malestar y al término del medio tiempo despidió a los Guerreros en medio de una silbatina, pues no daban crédito a lo ocurrido.
Oribe Peralta se reconcilió con el gol y anotó su tercero de la noche al minuto 71 al rematar de cabeza un centro de Carlos Adrián Morales para el 4-2.
"El Cepillo'' estaba encendido y al minuto 79 aprovechó un "regalito'' de la defensa potosina para anotar su cuarto tanto e igualar la marca de Eduardo Lillingston y Jared Borgetti, adelantando a los Guerreros 5-2, marcador que sería definitivo.
Hérculez Gómez salió por cambio al minuto 77 y fue despedido entre aplausos.
El partido concluyó entre aplausos y porras de los aficionados. Oribe Peralta fue largamente ovacionado. Fue una noche inolvidable para "El Cepillo'', que con sus cuatro tantos le devolvió la alegría a los aficionados.
Oribe Peralta recuperó su paso goleador anoche ante San Luis. Oribe iguala marca de Jared y Lillingston