El cancerbero verdiblanco dijo que las finales hay que saberlas jugar, por lo que en lo táctico lo hicieron bien.
Oswaldo Sánchez no quita el dedo del renglón. Explota contra el arbitraje por marcar un penalti agónico y que considera injusto, pero sabe que para coronarse, Santos debe sobreponerse aún contra los nazarenos que impartan justicia en sus partidos.
"Ya estuvo bueno, qué arbitraje tan tendencioso. Baloy va fuerte a la pelota, no se vale, siempre nos marcan en contra, pero ¿sabes qué?, contra eso podemos y vamos a ser campeones allá en nuestra casa, en Torreón", despotrica el guardameta de los Guerreros laguneros.
Tampoco el meta de los Guerreros siente temor. Sus palabras en contra del arbitraje de Mauricio Morales son firmes, contundentes y con cierto desprecio.
Sin embargo, descarta cualquier inquietud por ser castigado por la Comisión Disciplinaria tras exponer su sentir.
Al contrario, manifiesta que quiere ganar a como dé lugar.
"No espero que me quieran sancionar por decir esto [contra el silbante], si no lastimé a nadie, no le tengo miedo a eso, yo quiero ganar y ganar en buena lid", explica un severo Sánchez.
Benjamín Galindo, técnico de los laguneros, expresa un respeto absoluto hacia lo dicho por su capitán apenas acabó el partido.
Contrario a la efusividad de Oswaldo, "El Maestro" evita cualquier discusión sobre la pena máxima que convirtió Humberto Suazo y que derivó en el empate de Rayados sobre la hora.
"Respeto lo que dijo Oswaldo, quizá fue un penalti, pero muy dudoso".