El monóxido de carbono, incluso en cantidades pequeñas como la del tráfico vehicular, causa graves daños a la salud. INGIMAGE
El monóxido de carbono, con fórmula química CO, es un gas inodoro, incoloro, inflamable y altamente tóxico. Este es producido por calentadores defectuosos, cigarrillos y los escapes de los automóviles, entre otros.
Estar expuesto a altas concentraciones de monóxido de carbono y respirarlo puede ser letal, pues sustituye al oxígeno en la hemoglobina en la sangre.
Ahora, un nuevo estudio ha demostrado que este gas, incluso en cantidades pequeñas como la del tráfico vehicular, causa graves daños a la salud.
De acuerdo a información proporcionada por la BBC, investigadores de la Universidad de Leeds realizaron un estudio en el que concluyeron que el monóxido de carbono, aún en ‘niveles considerados bajos, puede ser fatal para el ser humano, debido a su capacidad de trastocar el ritmo cardiaco’.
Lo anterior se debe a que ‘el gas mantiene los canales de sodio, fundamentales para controlar el ritmo cardiaco, abiertos por más tiempo’ y esto puede producir arritmias cardiacas que en el peor de los casos llevarían a la muerte.
Pese a los resultados, no todo es sombrío en la investigación, pues también se buscaron formas de tratar los daños producidos por el gas.
Para lo anterior se realizó un estudio con ratas que fueron expuestas a niveles de contaminación similares a los que se expondría un ser humano. Las ratas desarrollaron problemas cardiacos pero fueron tratadas con un medicamento para tratar la angina y se observó que el daño se revertía, lo que fue visto por los investigadores como una esperanza y una posibilidad de tratamiento.
Como dato adicional vale saber que algunos de los síntomas más comunes producidos por el envenenamiento con monóxido de carbono son las nauseas, el vómito, dolor de cabeza, problemas respiratorios, agotamiento, pérdida de conciencia y colapso. Si usted presenta un cuadro con estos síntomas le sugerimos tratarse de manera inmediata.
^AC