El mexicano Ramiro Peña se barre en home, pero no puede evitar el ponche. (Archivo)
Tras completar una buena temporada en la Liga Mexicana del Pacífico jugando para los Tomateros de Culiacán, el pelotero regiomontano Ramiro Peña espera consolidarse con los Yankees de Nueva York, en la campaña 2012 del beisbol de las Grandes Ligas.
A pesar de su corta edad, Ramiro ya suma tres campañas en el mejor beisbol del mundo y se ha ganado la confianza en uno de los equipos más complicados de la gran carpa: "Mi meta para este año es ganarme mi lugar en el equipo, jugar todos los días, tener más regularidad y colaborar con mis compañeros para que el equipo obtenga buenos resultados".
Peña debutó en 2009 con los mulos y a sus 26 años sabe que la responsabilidad aumenta: "El beisbol nacional ha crecido enormemente, se nota en el aumento de firmas de peloteros jóvenes. Hoy en día hay más peloteros mexicanos en los complejos de equipos de Grandes Ligas que años pasados, eso sin duda hace que nuestro beisbol se desarrolle con más velocidad".
Recordó sus inicios como jugador profesional, cuando durante su estancia en la academia de la LMB conoció el beisbol desde otra perspectiva: "El tiempo invertido en la academia me ayudó demasiado, ahí trabajé con mi técnica de fildeo y bateo. Esa etapa de mi vida la valoro mucho porque ahí aprendí a vivir como un jugador profesional, que la disciplina es la base del éxito, tengo muy bonitos recuerdos de mi paso por la academia".
A unos días de iniciar los campos de entrenamiento admitió que el trabajo físico será fundamental para tener una buena temporada, "sin duda que los trabajos previos deben estar bien diseñados. Es difícil competir contra tanta gente que busca un lugar, es por eso que hay que diseñar planes específicos en el campo y rutinas en el gimnasio para estar bien y poder competir de manera directa por un puesto en el line up".
A pesar de que anhela triunfar en los Estados Unidos, el regio no oculta su emoción de volver a México, "me gusta mucho jugar en México, los lanzadores son muy inteligentes. Es por eso que cuando un jugador mexicano va a un campo de entrenamiento en Estados Unidos lleva ese extra que en otros lados no hay".
El torpedero es un orgulloso egresado del programa de ligas pequeñas en México y le manda un mensaje a los niños peloteros que gustan de practicar la pelota caliente: "Mi consejo para los niños es que jueguen para divertirse, que sean constantes en sus entrenamientos y que pongan en práctica todas las recomendaciones de sus coaches. Tomando en cuenta esas tres premisas, sin duda van a ser buenos jugadores".
