Datos. El crimen organizado se filtró en dependencias federales como la SIEDO y el Cisen.
México, DF
Documentos ministeriales y federales aseguran que funcionarios de la Procuraduría General de la República (PGR) recibían sobornos para proteger a jefes del narcotráfico que operaban en Durango, Sinaloa y Guerrero.
LA SIEDO Y EL CISEN INVOLUCRADOS
Medios de comunicación de circulación nacional tuvieron acceso a documentos que revelan que operadores de un grupo de la delincuencia organizada consiguieron el apoyo de servidores públicos del centro de arraigos de la PGR y del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen).
El reporte señala que el jefe de un grupo delictivo pagó la colaboración de funcionarios de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO).
De acuerdo con dichos documentos, los servidores públicos le facilitaban información anticipada sobre cateos y pesquisas que la dependencia llevaría a cabo contra de ese grupo.
INFORMACIÓN NACIONAL
La nota de agencias nacionales señala que a principios de año dos abogadas de los socios de un capo fueron detenidas y, para evitar la cárcel, decidieron colaborar con la PGR y revelar supuestos sobornos a funcionarios.
Se publicó que, "Libre" y "X" -nombres clave de las testigos protegidas- revelaron que el principal publirrelacionista del cártel era José Gerardo Ortega, yerno del exsecretario de la Marina, Ricardo Ruano Angulo y quien ya está preso en el Penal de Matamoros.
Las abogadas aseguran que algunas de las informaciones las obtuvieron para favorecer a Carlos Moreno, "La Calentura"; Felipe Cabrera, "El Inge"; y Noel Salgueiro, "El Flaco", lugartenientes que operaban Durango, Sinaloa y Guerrero, estos dos último presos.