El primer ministro británico, David Cameron, pidió hoy al presidente sirio, Bachar al Asad, que deje el poder para evitar "una guerra civil", tras la escalada de la violencia y el ataque del miércoles contra la cúpula de Defensa.
"Tengo un mensaje muy claro para el presidente Asad. Es hora de que se marche. Es el momento de una transición. Si no hay una transición, está claro que habrá guerra civil", dijo Cameron en unas declaraciones en Afganistán recogidas por los medios británicos.
Los enfrentamientos entre la oposición y el régimen sirio se han intensificado y ayer murieron en un atentado en la capital el ministro de Defensa, el general Daud Abdelá Rayiha; el viceministro de este departamento, el general Asef Shaukat, cuñado del presidente Asad, y el asistente presidencial Hasan Turkmani.
Cameron subrayó que no creía que un régimen que lleva a cabo actos de violencia "debiera sobrevivir" y pidió al presidente ruso, Vladimir Putin, que apoye medidas contra el presidente Al Asad.
"Mi mensaje al presidente Putin es que es hora de que el Consejo de Seguridad de la ONU apoye mensajes claros y duros en cuanto a sanciones" contra Siria, dijo el primer ministro, que realiza una visita a Afganistán.
En clara referencia a países como Rusia y China que se han negado a tomar medidas contra Damasco, el político conservador preguntó: "¿Qué más pruebas necesitan?".
"Creo que es en interés de todos que haya una transición", puntualizó Cameron al insistir en la marcha de Al Asad.
Está previsto que la ONU vote hoy una nueva resolución sobre Siria presentada por el Reino Unido que amenaza con aplicar sanciones no militares contra Asad si no retira sus tropas y su armamento pesado de las áreas pobladas en diez días.
El texto de resolución está vinculado al capítulo 7 de la Carta de la ONU, que permitiría eventualmente el recurso al uso de la fuerza para poner fin a la violencia en Siria.
Miles de personas han muerto en Siria desde el comienzo de la rebelión contra Al Asad en marzo de 2011.