Inseguridad. Habitantes de fraccionamientos acuerdan cerrar el acceso a sus calles debido a los robos de los que han sido víctimas, el Cabildo lo autoriza si todos tienen la misma visión.
A dos semanas de que el Cabildo autorizara el cierre de la privada Leandro Valle en la colonia Benito Juárez por la alta incidencia de robos, ahora son los vecinos del fraccionamiento Artemisas quienes hicieron esta solicitud que ya fue aceptada por el Pleno.
El regidor Julio Enrique Cabrera Magallanes, miembro de la Comisión de Desarrollo Urbano, comentó que en año y medio se han recibido entre cinco y seis solicitudes, en la entrevista anterior con el caso de la colonia Benito Juárez iban dos aceptaciones, con la de esta semana suman tres calles bloqueadas.
La calle del fraccionamiento Artemisas que se pide cerrar con una valla metálica es una privada y ha sido muy "golpeteada" por los robos y el desorden, por ello los habitantes solicitan el cierre.
El motivo del requerimiento son los robos, y es que cuando el ladrón entra la domicilio escapa muy fácil y no los alcanzan, pero al poner un barandal o barda se inhibe la pretensión de entrar.
La condición para apoyar la petición es que al primer indicio de problemas se retira la estructura.
Se han autorizado siempre y cuando haya consenso y la firma de los vecinos, ya que se hacen problemas con tan sólo una o dos personas en desacuerdo.
Muestra de ello es que en la solicitud del fraccionamiento El Edén para cerrar andadores por problemas sociales, los habitantes del fraccionamiento Huizache lo rechazaron y no ha procedido la solicitud.
Para tal trámite los vecinos deben formar una asamblea y firmar acta para solicitar que su privada tenga portón, después la Dirección de Desarrollo Urbano verifica las condiciones de la estructura para que no se generen daños, además se realiza una encuesta entre los vecinos para confirmar que todos están de acuerdo.
Mencionó que con dificultad se encuentran desacuerdos durante los sondeos, por lo que casi en su totalidad proceden las solicitudes.
Una vez que las personas estén de acuerdo la solicitud llega a la Comisión de Desarrollo Urbano del Ayuntamiento y después al Pleno de Cabildo; la autorización debe ser unánime, aunque la Comisión tenga un dictamen.
JOSÉ ANTONIO RODRÍGUEZ/ El Siglo de Durango
