Novak Djokovic salió molesto tras caer en Madrid, España. (AP)
La jornada del 11 de mayo en el Madrid Open fue de absoluta sorpresa. El número uno, Novak Djokovic del mundo fue derrotado 7-6 y 6-3 por el también serbio Janko Tipsarevic, de 27 años. El que algunos le llaman "Doctor Loco" demostró adaptar su juego a la resbaladiza pista azul. Este partido perdurará en el tiempo.
Al inicio del encuentro entre los serbios, el actual campeón del Madrid Open sobrellevó la tenacidad de Tipsarevic, un partido que estuvo muy cerrado y en el que ambos no daban su brazo a torcer. El 'tie-break' concluyó el vencedor del primer set. El dominio del terreno en esta ocasión lo tuvo Tipsarevic, que alcanzó la delantera con 4-0 que le fue imposible a Djokovic remontar.
El segundo set se desarrolló de manera similar, ambos con un servicio inquebrantable, pero en el quinto juego la suerte acompañaría por un momento al número uno del mundo y tomó ventaja. Pero el "Doctor Loco" no bajó en ningún momento la guardia, se recuperó y pasó a las semifinales, tal vez la oportunidad de alcanzar su primer Master 1000.
Janko, quien está claro que aún le queda un largo camino por recorrer, comentó: "tengo que ganar a dos jugadores muy, muy buenos. Como todos saben no he ganado un Master Series. Este sería algo nuevo para mí. Ganar al primero del mundo, está claro que me da mucha confianza para pensar que puedo hacerlo".
El juego que se disputará hoy con el suizo Roger Federer, un rival nada sencillo, pero si algo ha dado este torneo son más que sorpresas y aunque Federer es de los mejores y ha obtenido este título en otra oportunidad, está más que claro que sobre la pista azul nadie se puede confiar.
'NOLE' TAMBIÉN DIRÍA ADIÓS
Las reacciones de los jugadores siguen calentando los ánimos. En esta oportunidad, las últimas declaraciones de "Nole", aunque felicitó a su compatriota y contrincante por su triunfo, la ATP no corrió con la misma suerte.
"Sólo quiero dar la horabuena al que ha jugado un buen partido hoy (ayer), a Janko. Creo que está jugando uno de los mejores torneos de toda su carrera. Estoy orgulloso. Creo que puede, tiene juego, tiene la confianza en la pista", y en cuanto a la pista acotó que si la tierra seguía siendo azul, él no estaría en el Madrid Open del año que viene. "Simplemente tengo ganas de volver a la verdadera tierra, a esto no le llamo tierra". También indicó que la ATP debe considerar seriamente lo que los jugadores piensan y lo que quieren: "si la ATP protege a los jugadores y les apoya, pues entonces, no hay manera de que Madrid vaya a mantener la pista azul".
Pero el caso contrario es Tipsarevick, quien sorprendió por sus declaraciones totalmente distintas. "Creo que no tiene nada que ver con la tierra azul. Tiene que ver con lo resbaladiza que es la pista. Todo el mundo, bajo lo que yo entiendo, está echando la culpa a la pista porque verdaderamente es muy, muy resbaladiza y cuesta defenderse".