Los plantan. Los manifestantes se quedaron con las maletas listas, debido a que ni el estado ni el municipio enviaron los camiones prometidos.
Las avenidas Morelos e Hidalgo en su cruce por la calle Centenario de Gómez, ayer permanecieron bloqueadas por un par de horas, por familiares de internos trasladados recientemente del Cereso Número Dos de Gómez Palacio, hacia otros centros penitenciarios.
El motivo, según los afectados fue el incumplimiento por parte del gobierno del Estado y el Municipio para apoyarlos con un camión que los trasladaría a Durango a ver a sus familiares, pues se había acordado que después de una semana del traslado se les permitiría verlos.
Los familiares de internos, en su mayoría del fuero común, se quedaron con las mochilas apiladas en una esquina de la Plaza de Armas en donde se acordó la reunión para el viaje a Durango.
La salida fue programada a las 10 de la mañana de ayer, pero los camiones nunca llegaron y por lo que comenzaron los bloqueos.
"Yo tengo dos hijos en el Cereso y hasta ahorita no sé nada de ellos, ya fui a Durango a buscarlos, pero no me dejaron verlos, no tengo recursos para estarme trasladando, por eso estoy aquí pidiendo el apoyo de las autoridades para intentar verlos otra vez", dijo Catalina García.
Su desesperación, además de la falta de recursos para viajar hasta la capital en donde les dicen que están recluidos la mayoría, es porque en algunos casos ni siquiera se ha podido tener un contacto con sus familiares.
"A mi hijo lo trasladaron herido, no sé cómo está, yo vengo desde Ciudad Juárez, ya perdí mi trabajo, pero no me importa, porque lo único que quiero es verlo y saber que está bien, pero no nos dicen nada", dijo Angélica Valdés.
El Siglo de Torreón se comunicó al Cereso de Durango durante la manifestación y la respuesta fue que los permisos de visita se darían hasta la segunda quincena del mes de enero.
En otros casos, los manifestantes indicaron que ya contactaron vía telefónica a los internos y que ahora quieren verlos para saber el estado en el que se encuentran.
Durante la manifestación María de Jesús Solís, rompió en llanto al recibir la llamada de su hijo "Chilo" que está recluido en el Cereso de Durango.
-Dice que está bien y eso es lo que quería saber- dice la mujer.
LEVANTAN BLOQUEO
"Ellos tienen la obligación y deben tener el poder de mantener el control de un Cereso, porque si no pueden ni con una cárcel, menos con un municipio, un estado o un país", dicen.
El bloqueo se levantó luego de que se acordara con las autoridades una visita el día de hoy al Cereso de Durango, por parte de una comisión de familiares para ver a los presos de Gómez.
El centro penitenciario, ubicado en esta ciudad, fue cerrado el 20 de diciembre, luego de un fuga frustrada que dejó como saldo oficial 24 muertos y que se dio después del traslado de 137 reos a otras cárceles del país.
