'Por nosotros, que Santos juegue todos los días'

David "El Güero" descansa un momento del intenso calor que se vive en el crucero donde trabaja desde hace casi dos años, el hombre de 33 años es uno de los cientos de trabajadores que existen en cruceros de Torreón de manera permanente.

Durante casi una semana David se ha dedicado a vender productos del equipo Santos Laguna debido a la efervescencia del fútbol en la ciudad, las banderas, trompetas, sombreros, playeras y otros artículos similares han significado la manera en que el comerciante lleva a ingresos a su familia durante estas semanas.

"Ya me duele mucho un pie, aquí duramos parados doce horas y en el sol está gacho... Luego del domingo vamos a descansar si vendemos todo, si gana el Santos hasta nos va a faltar mercancía", dice el vendedor.

Cada mañana un grupo de comerciantes originarios de la Ciudad de México visita a cada vendedor en su crucero a temprana hora, reparten las mercancías a precio de mayoreo y la jornada comienza cerca de las nueve de la mañana.

Son muy pocos los vendedores locales que distribuyen sus propios productos y por lo general existe una "buena organización", según comenta el comerciante.

"Si se fijan muchas banderas se parecen, ellos nos dan un precio y ya cada quien le pone un precio... a mi me gusta dar todo barato para que se venda rápido".

 NECESIDAD

David dejó los estudios varios años atrás debido a la necesidad económica que existía en su hogar, en ese momento decidió trabajar como vendedor en algunos cruceros, con el paso de los meses se movía de un lado a otro hasta que finalmente se instaló en el cruce de Cuauhtémoc y bulevar Independencia.

En este mismo sitio y a tan sólo unos metros se encuentra Juan, quien es mejor conocido como el payaso "rayito de sol", ambos deben de soportar temperaturas mayores a los 35 grados diariamente y saben que si el equipo de casa juega las ganancias son mejores.

"Hasta parece que la gente anda más feliz, por nosotros que el Santos juegue todos los días y si gana mejor", comenta el trabajador del crucero con un tono alegre.

David y Juan se comparten una botella de agua para evitar la deshidratación, ambos han estado trabajando desde hace horas y les resta una jornada más para terminar su día de ventas y actividades en el crucero.

"Es mucho desgaste el que tenemos pero todo sea por comer mejor, todo el año aprovechamos las fechas especiales para vender dependiendo de lo que se festeje, pero en esta final esperamos que nos vaya muy bien", dice el "Güero" de forma optimista.

 BUEN DESEO

Una luz verde más y es el momento de que los dos trabajadores de crucero hagan lo suyo, David toma algunas banderas y Juan alista algunos malabares, el sudor recorre la fuente de ambos y David ya tiene una lesión en el pie.

Sin embargo para el domingo el objetivo es terminar sin mercancía y con buenas ganancias, "en serio que el Santos quede campeón, si lo hacen aquí me van a ver muy noche trabajando".