COMPETENCIA Y CREDIBILIDAD
Vivimos en un mundo donde la velocidad del cambio es un imperativo. No tenemos otras opciones; necesitamos, pues, determinar nuestras relaciones en el trabajo de inmediato.
La tecnología nos ha permitido contar con recursos para lograrlo -correo electrónico, buzón de voz…. Hay, sin embargo, una necesidad humana básica de ver e interactuar con otras personas. Nuestro cerebro responde 60,000 veces más aprisa a un estímulo cara a cara -contacto humano- que a uno tecnológico.
Las primeras impresiones pueden ser efectivas o desastrosas, pero usualmente son duraderas. Nuestro objetivo, al tratar a otros, es establecer confianza, bienestar y afinidad; y eso no siempre es fácil.
Sobreponerse a una intimidación es sobreponerse a una traba que hay que conquistar cuando se trata de causar una buena impresión. Dónde sentarse en una junta, cómo actuar en un área de recepción al estar esperando ser atendida, cómo hacer una presentación, cómo sincronizar tu lenguaje corporal: todos los puntos centrales para causar impacto.
Siempre que entramos a un lugar, nuestra ropa, modales y manerismos están en desplegado. Otros detectan nuestra seguridad y nuestra firma de presencia profesional -un mensaje duradero que enviamos al instante que nos presentamos. Es la energía que introducimos al lugar junto con la confianza e iniciativa que demostramos. Esto nos ofrece una oportunidad para conectarnos de inmediato, para esto se recomienda una revisión personal detallada y así lograr un máximo impacto.
SONRÍE Y EL MUNDO SONREIRÁ TAMBIÉN
Inténtalo: sonríe. Esto funciona porque es casi imposible no hacerlo. Estamos programadas para imitar el comportamiento de otros. Una sonrisa es una de las herramientas más importantes en los negocios y la que, con más frecuencia, olvidamos usar. Una sonrisa es fácil y relajada, demuestra que disfrutas tu trabajo y el trato con la gente. La clase de sonrisa que relaja a todos.
UNA ATRACCIÓN NATURAL
Una primera impresión positiva no se logra con falsa adulación, con una actitud sumisa o tratando de dominar. Una primera impresión deberá lograr una conexión humana que incluya a las personas en el mismo plano. Va a influir para conseguir lo que te propones. Haz que esos primeros 60 segundos cuenten a tu favor.
