PRESENCIA PROFESIONAL
Los fundamentos de la interacción humana, no han cambiado mucho durante siglos, pero el ambiente periferial sí. Es preciso, pues, analizar tu efectividad con la gente y tu impacto, tanto a través de la electrónica como en lo personal… tu creatividad, competencia y trato social.
LA ENERGÍA ES LO QUE MUEVE AL MUNDO
Piensa en algunas personas que imponen su presencia cada vez que entran a algún lugar. ¿Qué es exactamente lo que motiva a la gente a poner su atención en ellos?
A los participantes a un seminario sobre liderazgo se les pidió que describieran lo que significaba para ellos la presencia física; la respuesta casi general fue energía y confianza propia. La energía es contagiosa, nos sentimos con energía después de una jornada de trabajo exitosa, emocionados presenciando un juego y entusiasmados al inicio de un proyecto.
Lo relevante consiste en que estamos hechas de energía, la presencia profesional se manifiesta. Cada persona tiene su estilo propio de comunicar su energía. No necesariamente tiene que ser una energía estimulante, extrovertida; puede ser una energía quieta, calmada, coherente; lo importante consiste en que sea proyectada. Las oportunidades para causar una buena impresión son fugaces, cuando las encontramos está en nosotros el proyectarla.
La apariencia es otro factor determinante, generalmente formamos nuestros juicios basándonos en los datos visuales que reunimos: ropa y acicalamiento son pistas importantes que acumulamos cada vez que nos encontramos con alguien. Justas o no, las percepciones y los juicios se hacen basados aparentemente en esta información superficial.
En algunas ocasiones no confiamos en una persona por su estilo en el vestir o por la manera como hace contacto visual, situaciones que vale la pena tomar en cuenta.
SUPONER, MEJOR QUE ASUMIR
Nunca resulta seguro asumir toda la información que recibimos sin cuestionarnos si realmente percibimos las pistas esenciales acerca del mensaje que alguien está tratando de enviarnos a través de la comunicación no verbal. La comunicación no verbal nos proporciona la información para llevar a cabo una conversación. El levantar los hombros, un guiño rápido de ojos, brazos cruzados y miradas de reojo, pueden ser definitivamente pistas acerca de lo que alguien está pensando.
Los gestos facilitarán la comunicación efectiva si tenemos el valor de clarificar lo que pensamos sobre lo que vemos.
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