Ecológicas. Las ollas solares representan una buena opción para que las familias en los ejidos dejen de cocinar con leña.
Al cocinar con ollas solares, se aprovecha la energía del sol, se deja de consumir gas, en las comunidades rurales se evita la tala de árboles para obtener la leña y los alimentos conservan todos sus nutrientes.
Sandra Hernández, presidenta electa del Club Rotario, explicó que tanto las vitaminas como los minerales se conservan en los alimentos, el sabor es más concentrado, se obtiene una buena textura y se apoya la economía de las familias, al no tener que utilizar gas.
"Hubo mucho interés, la gente estuvo preguntando mucho, es algo que puede repercutir en su economía", comentó.
En su presentación, las damas del Club Rotario cocinaron en estas ollas huevo, arroz y picadillo.
El huevo tarda cerca de una hora en cocerse. Se coloca en una olla oscura sobre dos tablitas de madera para que circule el vapor, dentro de una bolsa de prolipropileno que se cierra con un mecate, que es lo único que no conduce calor.
A la bolsa debe dársele un poco de aire antes de poner la olla, luego se coloca en la estufa solar de modo que lleguen directamente los rayos solares.
Los huevos se cocen sin agua. En el caso del arroz, se le añade un poco de aceite, mientras que en el picadillo no es necesario agregar agua, pues con los jugos que suelta la propia carne es suficiente para que se cocine.
Hernández dijo que la presentación de las ollas solares a cargo de las damas del Club Rotario en el Festival del Sol ha generado cada vez más interés de la ciudadanía en el tema.
