Kofi Annan, enviado especial de Naciones Unidas (ONU) y la Liga Arabe para Siria presionará a los gobiernos "con influencia" en Damasco para que el presidente Bashar al Assad cumpla con el plan de paz al que se comprometió, se informó.
"Es posible que Annan les tuerza el brazo a los que tienen influencia para hacer cumplir el plan de paz", dijo a la prensa en sentido figurado Ahmad Fawzi, portavoz del mediador internacional.
Subrayó que en este momento y más que nunca "la parte más fuerte debe mandar un fuerte mensaje'', en este caso el gobierno sirio, que debe responder para detener las matanzas especialmente de civiles, mujeres y niños.
"El plan de paz no está fallando”, lo que está fallando es su implementación, afirmó Fawzi en referencia a las partes en conflicto que suscribieron el documento desde el pasado abril.
Expresó su preocupación por el aumento de violencia sectaria en el país y que ésta se extienda hacia Líbano, por lo que Annan sigue presionando a los países con influencia "para que de forma irrevocable las partes implementen el plan y detengan la matanza".
Hasta ahora Rusia y China han vetado las resoluciones que condenan la violencia en Siria en el Consejo de Seguridad.
Por otra parte, Fawzi llamó una vez más al ejército y a las fuerzas opositoras para poner un alto al fuego y permitir la entrada de los observadores internacionales principalmente en los bastiones de la oposición como Homs.
La víspera Fawzi envió un comunicado en el que mencionaba que cientos de civiles están atrapados en Haffa por una escalada de combates en donde se observaron ataques con artillería pesada y helicópteros.
Al ser cuestionado sobre el uso de helicópteros en el conflicto, dijo que no tenía documentado su uso antes, pero ahora cuenta con videos en los que se muestran esos ataques.
Señaló que por el momento no se ha discutido la posibilidad de establecer una "zona de exclusión aérea", y admitió que desconoce si el ejército sirio está utilizando algún tipo de gas tóxico en los combates, tal como lo ha denunciado la oposición.
Descartó hablar sobre la posibilidad de que se lleve el caso de Siria a la Corte penal Internacional, tal como la Alta Comisionada de la ONU para Derechos Humanos, Navi Pillay, lo ha solicitado ante la clara evidencia de la existencia de crímenes contra la humanidad.
