La leche materna protege a los recién nacidos de padecer cáncer, celiaquía y esclerosis múltiple, de bacterias y virus.
La Responsable de Salud reproductiva de la Secretaria de Salud, Lourdes Martínez Staines, informó que la leche materna protege a los recién nacidos de padecer cáncer, celiaquía y esclerosis múltiple, de bacterias y virus.
“Asimismo, disminuye la posibilidad de desarrollar obesidad, diabetes mellitus, hipertensión y problemas cardiovasculares en la edad adulta”, detalló la especialista.
Destacó que los niños cuyo periodo de lactancia supera los seis meses, reduce la posibilidad de presentar leucemia aguda infantil y linfomas.
“La leche materna contiene una proteína denominada alfa-lac, la cual según estudios, induce a la reducción de células cancerígenas y células inmaduras, favoreciendo el crecimiento de células maduras y estables”, dijo.
Otros importantes beneficios son el sano desarrollo de los dientes, lo que ayuda el adecuado desarrollo de la mandíbula y estructura de la boca, además de la prevención de la caries.
Añadió que también auxilia al sistema digestivo y coadyuva a un mejor desarrollo cerebral, además los bebés tienen una mejor respuesta inmunitaria frente a las vacunas.
Martínez Staines destacó que los beneficios se extienden a la madre, pues al dotar a su hijo de leche materna, se disminuye el riesgo a padecer cáncer de mama y ovario, así como el riesgo de sufrir osteoporosis en la menopausia.
“La recuperación del útero para que vuelva a su tamaño natural y la pérdida natural de peso, son otros de los múltiples beneficios que la madre obtiene por dar el alimento más completo que existe para el recién nacido”, concluyó.