La actual crisis económica en la UE ha provocado el aumento en la violencia de motivación racial y la popularización de partidos y movimientos de extrema derecha, alertó hoy la Red Europea Contra el Racismo (ENAR, por sus siglas en inglés).
“Las violencias con motivación racial cometidas tanto por grupos neonazistas como por otros están en alza, paralelamente a un creciente éxito de los partidos y movimientos de extrema derecha”, señaló el informe de la ENAR de 2010 y 2011.
El reporte de la red, con sede en Bruselas, fue publicado este miércoles en ocasión del Día Internacional contra el Racismo.
La tendencia fue particularmente observada en Reino Unido, Dinamarca, Hungría, Grecia y Polonia, y afecta sobre todo a la población de origen africana, seguida de los gitanos, los musulmanes y los judíos.
Los negros son el grupo más vulnerable al racismo en Europa y también el más expuesto a discriminaciones, debido a su fácil identificación por el color de la piel, concluyó la ENAR al analizar la situación en los 27 países de la Unión Europea (UE).
En Reino Unido, por ejemplo, tienen seis veces más posibilidades de ser controlados por la policía que los blancos, mientras que en Letonia la mayoría de los negros con un diploma universitario no logra un empleo correspondiente a su nivel de educación.
Los miembros de esas comunidades étnicas también se enfrentan a “numerosas” dificultades a la hora de encontrar empleo y, como consecuencia, son los más afectados por el paro, así como los inmigrantes de manera general.
“Los inmigrantes y las minorías étnicas son afectados de manera desproporcionada por el desempleo y condiciones precarias de trabajo en períodos de crisis económica”, indicó la red, compuesta de más de 700 Organizaciones No Gubernamentales dedicadas a la lucha contra el racismo.
Para el presidente de la ENAR, Chibo Onyeji, “los políticos deben pasar el mensaje que un acceso igual al trabajo, a la vivienda y a la educación es esencial para la construcción de una sociedad próspera y cohesiva”.
“Es inquietante ver que el racismo y las discriminaciones siguen estando omnipresentes en Europa”, concluyó.