Próximo gobierno debe seguir lucha anticrimen: FCH
El presidente Felipe Calderón demandó que el próximo gobierno se comprometa verdaderamente a combatir a la criminalidad porque simular que no pasaba nada fue lo que permitió el avance de la criminalidad en el país.
Por ello insistió en que combatir al crimen no debe tener colores partidistas, e hizo énfasis en que en esta administración se está dejando un legado a los mexicanos, que es que los criminales no queden impunes de sus actos.
En la ceremonia del Día Internacional de la Lucha contra el uso Indebido y el Tráfico Ilícito de Drogas en el Castillo de Chapultepec, Calderón exigió que el próximo gobierno actúe paralelamente en los ejes de combate a la criminalidad, fortalecimiento de instituciones y del tejido social.
Esta fecha debe movernos sobre este desafío y echar a andar acciones contra el tráfico ilícito de drogas.
Comentó que será importante que se siga trabajando de la mano con la sociedad civil para fortalecer el tejido social, para darle a los jóvenes las oportunidades que demandan y sobre todo para hacerles entender el peligro de las drogas y las adicciones.
Las drogas ilícitas asesinan al distribuirlas y al consumirlas, dijo el mandatario, quien resaltó que las muertes en la región están vinculadas a su tráfico.
Ante representantes de las Naciones Unidas en materia de drogas, Calderón comentó que en su gobierno se han destinado 6 mil 600 millones de pesos para la atención a las adicciones, he hizo énfasis en que el consumo de cocaína en México prácticamente se detuvo luego de un repunte significativo entre el 2004 y 2008.
En el acto, el presidente Calderón no hizo referencia al episodio de violencia que se registró en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México donde tres agentes federales fueron asesinados por elementos de la misma corporación.
En esta ceremonia fueron entregados reconocimientos a organizaciones de la sociedad civil que se han dedicado a prevenir y atacar las adicciones, entre ellas a Oceánica, el Instituto Carlos Slim de la Salud (recibido por el hijo del empresario Marco Antonio), la Fundación Gonzalo Río Arronte y la Fundación Monte Fénix AC.
Sentados en primera fila, el secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, fue a sentarse a lado de Calderón y con él habló casi 3 minutos mientras pronunciaba su discurso el titular de Salud, Salomón Chertorivsky.
De hecho, el protocolo marca que cuando sube al estrado quien esté a lado del mandatario, el más próximo debe recorrerse para no dejar la silla vacía junto al Presidente.
En esta ocasión el orden era el siguiente: Calderón y a su derecha estaba Chertorivsky, enseguida Antonio Luigi Mazzitelli, representante regional para México, Centroamérica y El Caribe de la Oficina de las Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito, y después seguía García Luna.
Sin embargo, al llegar Calderón habló unas palabras con el secretario de Salud y luego este lo hizo con García Luna. Mazzitelli pronunciaba su discurso. Cuando bajó Mazzitelli y siguió Chertorivsky en su mensaje, García Luna se pasó a lado de Calderón y hablaron casi 3 de los 4 minutos en la intervención del secretario de Salud.
