Algo en común. Los últimos papeles de la actriz Cecilia Suárez, tanto en cine como en televisión, han tenido en común que padecen algún desorden mental. (Archivo)
En octubre pasado, durante el certamen de cine de Morelia, Cecilia Suárez se rió cuando recordó que en los últimos años, había encarnado a mujeres con desequilibrio mental.
Si en la serie Locas de Amor encarnó a alguien obsesionada con la limpieza; en el filme Hidalgo, La Historia Jamás Contada, tenía el papel de una joven religiosa que pasaba hambres como penitencia.
Ahora se suma otro dato más: su cinta Nos Vemos Papá, en donde su personaje tiene una relación especial con su padre, será estudiada por psicólogos en Europa.
La historia integrar el Films by the Sea Film Festival, en los Países Bajos, donde existe el programa Do You Mind?, donde especialista de salud mental analizan los filmes que ahí se proyectan.
“Quién sabe por qué nos llamaron”, bromea Edher Campos, productor de la cinta.
“Está tomando su propia vida, es una película muy personal”, agrega el ejecutivo. Nos Vemos Papá es la ópera prima de Lucía Carreras, producida por Machete, creadora de Año Bisiesto.
Ya se presentó en Karlovy Vary, uno de los más importantes certámenes del viejo continente y pronto hará lo mismo en Israel.
En México, estará en el festival de Puebla y su estreno comercial se tiene contemplado para fines de año. Ya también hay invitaciones en Grecia a India y espera respuesta de festivales en Colombia, Argentina y Cuba.
“Aquí estamos pensando apoyarnos en psicólogos en su estreno”, dice Edher.
