De acuerdo a estudios realizados por encuestas públicas y por investigaciones controladas en universidades, se ha llegado a la conclusión de que en general las mujeres no pueden mantener un secreto por más de 32 minutos, aunque se trate de los secretos más confidenciales, o que las pueden dañar, tanto en lo físico como en lo moral.
Cuando estaba uno chico, solía decirse que las formas más rápidas de comunicación eran: los telegramas, el teléfono y cuando se lo contabas a una mujer; claro que esos conceptos han cambiado, porque ahora tenemos las redes sociales que son aún más rápidas. Por eso, lo más probable sea que no es cuestión de minutos, sino de segundos cuando un chisme se puede conocer.
¿Qué es lo que origina el que una mujer no pueda guardar un secreto? En primer lugar, pensamos que también el hombre chismea, que no es privativo de la mujer el ser chismoso; además de que en comparación, la mujer dice un mayor número de palabras por minuto que el hombre, y por lo tanto, tiene más que contar, lo que da lugar a que sea más fácil que se le escapen las confidencias.
Sin embargo, esto trae consigo un consejo, recuerden que: "en boca cerrada no entran moscas", lo que quiere decir que no hay que contar nuestros propios secretos a nadie (ni a hombres, ni a mujeres).