Zoonosis se refiere a enfermedades infecciosas de las aves que se pueden transmitir a los humanos. Los agentes infecciosos pueden ser protozoarios, hongos, baterías, clamidas o virus. La seriedad de estos padecimientos varía con la edad, estado de salud y estado inmunitario. La habilidad de los microorganismos para hacer que una persona se enferme varía de acuerdo a la virulencia del organismo, las dosis y la ruta de infección. Las clamidiosis, salmonelosis, arizonosis y colibacilosis son las infecciones más comunes; así como la tuberculosis aviar, que puede requerir tratamiento de por vida.
Existen 200 serotipos de Salmonela y la mayoría de los animales la pueden contraer. Los síntomas más comunes son diarrea, vómito, fiebre leve y la infección origina deshidratación y debilidad. Puede ocasionar septicemia, dolor de cabeza y problemas en el bazo y algunas veces la muerte, sobre todo en los ancianos. Afecta a cualquier órgano: corazón, riñones, articulaciones, meninges. La ruta del contagio es fecal-oral.
Algunos hongos prefieren crecer en suelos enriquecidos con heces de pollo, produciendo Histoplasmosis en los humanos. Las aves no son susceptibles de la infección, pero los humanos sí. La enfermedad puede ser manifestada por daño pulmonar, cavidad pulmonar crónica y diseminación. Es caracterizada por escalofríos, dolor de pecho, tos, malestar y fiebre, pérdida de peso y problemas para respirar.
La Criptococosis en los humanos se manifiesta como meningitis y es precedida por una infección pulmonar con tos, estornudo, sangre, fiebre y malestar, cuello rígido y molestias visuales. La Criptosporidiosis en los humanos causa dolor abdominal, náusea y diarrea acuosa por 3-4 días y en individuos con problemas de inmunidad puede causar severo daño, diarrea persistente con mala absorción de nutrientes.
¿Por qué estamos tratando este tema?... Porque resulta que se han estado presentando en Torreón padecimientos relacionados con las vías respiratorias que se califican como gripes, bronquitis y hasta neumonías, además en formas recurrentes, así como problemas de tipo digestivo tales como diarreas, también recurrentes, y problemas oculares de tipo infeccioso; y recién nos enteramos que al parecer en nuestra ciudad, particularmente en el boulevard Constitución, se han estado abonando los jardines públicos con heces de pollos. De ser esto cierto, nos preguntamos… ¿Lo saben las autoridades sanitarias?... ¿han aprobado ese tipo de abono?... Exigimos respuestas.
