Radiografía Política / Que Todo Fue Legal En días casi consecutivos, instituciones de salud se vieron afectadas durante periodos considerables de tiempo por fallas de energía eléctrica. Primero, el miércoles, la clínica 44 del Instituto Mexicano del Seguro Social vio interrumpida su actividad durante casi una hora, lo que provocó molestia en derechohabientes, que ya de por sí deben esperar largos periodos para ser atendidos.
Y ayer la afectación llegó a Hospital General y a los centros de Cancerología Transfusión Sanguínea; aunque en los dos primeros, por su naturaleza, cuentan con respaldo de energía para casos como este, debe ponerse mayor atención, pues las plantas propias no tienen "luz" para siempre.
En el caso del Centro de Transfusión, las operaciones de plano se vieron interrumpidas, dejando a muchos sin la oportunidad de cumplir con su procedimiento. Amén de las razones por las que se hayan presentado los problemas, se debe poner atención en estos espacios, pues dejar sin energía a un hospital no es cosa menor; si es que fue un corte planeado por la Comisión Federal de Electricidad, se requiere más coordinación, pues un aviso habría evitado el esfuerzo inútil de quienes no lograron concretar sus procedimiento médico.
Hace un par de días, este doctor reveló el problema de una madre de familia que acusó el retiro irregular de sus hijos por parte de autoridades asistenciales.
Ayer, hasta este consultorio llegaron un par de documentos emitidos por el DIF Municipal en los que se precisa que no hubo responsabilidad alguna del organismo en el presunto despojo, mismo que, según la versión, se realizó en un procedimiento apegado a derecho por parte de la Procuraduría de la Defensa del Menor. El retiro, se precisa, se realizó en base a una denuncia previa realizada en contra de la madre de los menores, y no por alguna conducta mostrada en el Albergue Municipal.