En Brasilia. La jefa de Estado de Brasil, Dilma Rousseff (d), recibe al presidente electo de México, Enrique Peña Nieto (i). (EFE)
El presidente electo de México, Enrique Peña Nieto, planteó el pasado miércoles a Brasil una relación comercial sin restricciones y estimó que Pemex debe seguir el ejemplo de Petrobras y convertirse en una petrolera estatal más competitiva con participación privada.
Peña Nieto se reunió con la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, en Brasilia y le manifestó su interés en dejar de lado restricciones al comercio bilateral como las que impuso el gobierno brasileño al intercambio bilateral de automóviles a comienzos de año, según afirmó al término del encuentro.
"Más que limitando los flujos creo que es ampliando la relación comercial de México-Brasil, Brasil-México" que se puede dar una solución al tema, afirmó el gobernante electo en una declaración a los periodistas.
En marzo, las mayores economías de Latinoamérica alcanzaron un acuerdo para limitar por tres años un acuerdo sobre comercio bilateral de autos luego de que Brasil presionara por varios meses tras registrar un déficit comercial con México.
Durante el encuentro del miércoles, ese tema no fue discutido de forma particular, aunque el deseo de México es avanzar "hacia una mayor relación comercial, una mayor apertura", según Peña Nieto.
De otro lado, el mandatario electo pidió a Rousseff información sobre la reforma que convirtió a Petrobras en una empresa mixta con participación del sector privado en los últimos años, con miras a hacer lo mismo con Pemex, la petrolera estatal mexicana.
"Le solicité a la presidenta poder conocer a mayor profundidad la reforma que en su momento se hiciera aquí en Brasil, para modernizar a Petrobras, porque éste es un modelo que sin duda inspira lo que queremos hacer en México con la empresa que es de todos los mexicanos", sostuvo.
Enrique Peña Nieto, se entrevistó con la jefa de Estado de Brasil, Dilma Rousseff, a quien le planteó establecer una mayor cooperación entre ambos países, lo cual redundaría en favor de toda América Latina.
"Una relación más estrecha" y "una mayor cooperación" entre las dos economías más importantes de América Latina "sería importante" para ambos países, pero también "para toda la región", pues serviría como locomotora para el comercio y la promoción de inversiones, dijo Peña Nieto a periodistas tras la reunión.
Explicó que propuso un "relanzamiento de las relaciones" para hacerlas "más cercanas y estrechas" y "trabajar en conjunto por el desarrollo de toda América Latina", no en "clima de competencia, sino de complementación".
Según Peña Nieto, la reunión fue "cordial y muy productiva" y encontró en Rousseff mucho eco a sus propuestas para fortalecer la relación comercial entre ambos países que, a su juicio, no responde al tamaño de sus economías.
"Debemos explorar el potencial que existe para una mayor apertura comercial y sacar provecho de un mercado que, entre los dos países, suma más de 300 millones de consumidores", indicó.
