Algunas barras de cereal tienen altos contenidos de azúcares y grasas saturadas. INGIMAGE
Llega la media mañana, su estómago le pide algo de alimento para continuar con las actividades del día, ya sea en el trabajo, la escuela o la casa, usted compra o toma de su escritorio una barra de cereal y se siente satisfecho por haber dado un alimento nutritivo al cuerpo. ¿Le parece familiar?
Casos como el anterior son comunes, sin embargo lo que le parecerá poco común es el resultado de una investigación reciente que ha concluido que las barras de cereal podrían no ser tan nutritivas como lo aparentan.
Lo anterior se concluyó gracias al estudio de treinta barras de cereal, pasteles y galletas que realizó una organización británica de consumidores llamada Which?, según información proporcionada por la BBC, y en la que se encontró que más de la mitad de estos alimentos superaron el 30 por ciento de azúcar en sus contenidos.
Cabe mencionar que la cantidad de azúcar recomendada diariamente no debe exceder el veinte por ciento y que incluso hubo casos donde estas cantidades superaban el 43 por ciento.
Además de la cantidad de azúcar, algunos de estos refrigerios ‘tienen altas tasas de grasas y grasas saturadas’. Esto se encontró en seis de las siete barras de cereales dirigidas a niños que se analizaron en la investigación.
Con estos resultados, Which? logró tener los argumentos necesarios para hacer un llamado a los productores de estos alimentos para que vigilen también su contenido nutricional, reduciendo la grasa y el azúcar y estableciendo ‘controles más estrictos sobre lo que promueven’.
Esta casa editorial les recomienda a sus lectores informarse del contenido energético y nutrimental de todos los productos que consuma para verificar que están dentro de los límites de lo saludable.
^AC
