Porque nuestros seres queridos nos necesitan sanos y contentos.
Dedicarse completamente a otras personas a pesar de que se trate únicamente de nuestra familia y a los seres queridos al igual que atender, el trabajo o compromisos son actos nobles; es realmente satisfactorio y enriquecedor. Sin embargo, muchas veces esto abruma, cansa y no deja tiempo o energía disponible para cuidarse a uno mismo. Con el paso del tiempo uno se acostumbra, actúa automáticamente sin pensar; actúa como si estuviese en un segundo plano. Tristemente esta manera de actuar se convierte en un hábito y sin querer uno tiende a olvidarse de sí mismo por poner a todos y a todo como una prioridad. Invariablemente esta “noble” manera de actuar, causa estrés, malestar y puede llevar de hecho, a los resultados contrarios a los deseados, ya que el cansancio irrita hace perder la paciencia y conduce a tener una menor disposición para disfrutar o atender a las personas que más quiere.
Aprender a cuidar de sí mismo, más que una buena recomendación es una necesidad que permite tener mejores relaciones personales y vivir una vida más plena.
Corina, una mujer muy responsable, se ocupaba gustosamente de atender a su esposo, su hogar y su trabajo. Cuando tuvo su primer hijo se dedicó a él con toda su alma sin abandonar sus otras responsabilidades. Como era de esperarse, las labores de madre requerían cada vez más de su tiempo. Corina disponía de menos ratos libres para limpiar la casa, para cocinar, lavar, las compras, su trabajo, etcétera. Aun así, ella se ocupaba de todo y de todos… excepto de sí misma. Comía parada y de prisa, se sentía constantemente cansada y preocupada, tenía poca paciencia y frecuentemente estaba malhumorada; no entendía qué pasaba después de todo, hacía lo que siempre había querido atender a su esposo y su hijo creando una bella familia.
Pasó el tiempo su hogar se convirtió en una casa llena de tensión y poca comunicación. Un buen día, su esposo, que ya se sentía desesperado por vivir en esta situación, le dijo: “De nada sirve tener la casa impecable, la comida lista, la ropa limpia y al niño bien vestido si por cualquier cosa te enojas, contestas de mal modo, gritas y todos sufrimos por esto. Deberías regresar al gimnasio y ocuparte un poco más de ti. ¡Te aseguro que todos vamos a estar mucho mejor y más contentos!”. A Corina, hacerse un poco de tiempo para sí misma se le hacía difícil y la llenaba de culpa, pero su marido le ayudó a entender lo importante que esto era para el bienestar de la familia.
Corina regresó al gimnasio, comenzó a darse tiempo para ella, aprendió a pedir ayuda y recordó lo valiosa que ella era.
No se puede cuidar de los otros si uno no sabe valorarse y cuidar de sí mismo.
Tiempo para uno mismo
Porque todos somos importantes.
INGREDIENTES
-2 tazas de cuidado personal
-1 manojo de balance
-2 cucharadas grandes de buenas elecciones
-1 sobre de responsabilidad
-1 tazón de acción diaria
-1 ramita de aceptación
CONDIMENTOS
Descanso, placer y diversión.
Nota del chef: Cuando uno se valora a sí mismo, disfruta más la vida y de sus relaciones con los demás.
MODO DE PREPARACIÓN
1. Cuando se hace menos, se logra más. Es complicado llenarse de múltiples actividades en el mismo día y hacerlas a la perfección. Además del cansancio y la frustración, esto eleva el estrés personal. Aprender a balancear el tiempo y a delegar ciertas responsabilidades ayuda al bienestar personal y familiar.
2. Es mejor ser un padre feliz que un padre perfecto. Ser un padre que sabe escuchar y disfrutar con sus hijos, que puede aceptar sus errores y sus límites es mucho más auténtico que un padre que aspira a la perfección, se estresa y causa tensión.
3. Cuando los padres están contentos todos se benefician. Para poder cuidar bien a los demás es importante sentirse bien con uno mismo. Hay actividades que producen un bienestar inmediato, tales como el ejercicio, el descanso, la relajación, el pasar tiempo con una buena compañía. Éstas nutren y complementan el complejo trabajo de ser padres.
“Uno se tiene que dar un tiempo libre y de descanso; no por ser egoísta sino por amor a los suyos”.