En contra. De irresponsable, violatoria de los derechos de los trabajadores, contradictoria y motivo de futuros estallidos sociales calificaron diputados del PRI, PRD, PT, PVEM, Panal y MC la reforma laboral del presidente Felipe Calderón.
De irresponsable, violatoria de los derechos de los trabajadores, contradictoria y motivo de futuros estallidos sociales calificaron diputados del PRI, PRD, PT, PVEM, Panal y MC la reforma laboral del Presidente Felipe Calderón.
Los legisladores recriminaron a la Secretaria del Trabajo, Rosalinda Vélez, que se haya enviado la iniciativa en la modalidad de preferente, pues sólo tendrán 10 días para dictaminarla, cuando se trata de una legislación de gran impacto para el país.
Por ello, advirtieron, podría no transitar en su totalidad, principalmente en aquellos artículos polémicos, como los de la autonomía sindical.
"¿Por qué se envía esta iniciativa justo cuando el gobierno está de salida y apenas comienza esta Legislatura? ¿No le parece un abuso más? ¿Por qué escoger un tema tan controversial, no le parece una burla al Congreso de la Unión y a los mexicanos?", reclamó el diputado perredista Martí Batres.
Otros legisladores coincidieron en que la reforma tiene impacto económico, social y político, por lo que se requería de mayor tiempo para su dictaminación.
"Cuando la envía el señor presidente, ¿estaba pensando en el país que va a dejar? Me parecería muy irresponsable, si nos sucede que mañana o pasado tengamos a la gente en las calles por una iniciativa mal manejada o aprobada.
"Él no va ser quien tenga que responder al descontento social, va a ser otro. Nosotros sí tenemos que ser responsables... Vamos a revisar lo que mandó el presidente y sacar lo que verdaderamente consideremos le sirve al país en este momento", advirtió el priista Patricio Flores.
La diputada panista Esther Quintana aseguró que al Legislativo le hacía falta un instrumento de presión para trabajar en los grandes temas que necesita el país, como una ley que data de 1970.
"Esta iniciativa es perfectible, no es una camisa de fuerza. La iniciativa de ninguna manera se la sacó de la manga o de la chistera de un mago el presidente Calderón, hay 497 iniciativas que la preceden, es una reforma sustantiva y el Congreso debe agarrar al toro por los cuernos", señaló.
En las tres rondas de participaciones, todos los cuestionamientos fueron encaminados a que es una reforma que trastoca los derechos de los trabajadores y no garantiza mejores condiciones ni más empleo.
Además que no podrían violentarse los convenios en materia de libertad sindical.
El tesorero del sindicato petrolero, Ricardo Aldana, aseguró que no se garantiza un incremento de empleo ni que mejoren los salarios ni que se encauce el empleo informal, por el contrario, dijo, hay riesgos de estallidos sociales.
Uno de los temas más polémicos fue la subcontratación, sobre el cual la diputada Luisa María Alcalde, de Movimiento Ciudadano, aseguró que en la reforma no se ponen límites, por lo que motiva una precarización generalizada del empleo.
El presidente de la comisión, Carlos Aceves, afirmó que para quienes han vivido años en "este valle de lágrimas", una reforma laboral no se reduce a "outsourcing", flexibilidad en la contratación y pago por hora, sino deben garantizar que el resultado de la Constitución de 1917 se respete.
"Hay cosas que no pasan de moda, pensar que porque lleva 40 años sin tocarse, se tiene que cambiar por otra, pues lo que creo es que hay que mejorar todo lo que se pueda mejorar", dijo el diputado priista y líder de la CTM.
Vélez afirmó que los legisladores tienen la responsabilidad histórica de darle al país una reforma fundamental para promover el empleo formal, y el desarrollo económico y social de la población.
"Está en sus manos la posibilidad de que jóvenes, mujeres y aquellos que ansiosamente esperan una oportunidad, puedan acceder a empleos mejor remunerados en condiciones más equitativas, armónicas y productivas", dijo la funcionaria.
