El sucesor 265 de San Pedro, saluda y bendice a un pueblo mexicano emocionado.
Después de una cálida recepción en el país, el Papa Benedicto XVI realiza un recorrido en Papamóvil, del Aeropuerto Internacional del Bajío al Colegio Miraflores, donde recibe el fervor de los católicos mexicanos.
La valla humana, que lo aguarda desde temprana hora, le da la bienvenida al jefe de la Iglesia católica en su primera visita a México.
El sucesor 265 de San Pedro, saluda y bendice a un pueblo mexicano emocionado.
Luis Hernández González, quien se encuentra en las vallas desde temprano, viajó desde Cihuatlán, Jalisco, con su esposa, para conocer a Benedicto XVI y pedirle por la paz en México.
“Claro, es el objetivo que viene nuestro Papa, que traiga la fe y la esperanza”, indicó.
Carlos Guzmán, originario de Puebla, sintió una gran emoción al ver al Papa; “una gran paz interior”, subrayó.
Agregó que el país necesita de paz y de armonía, que seguramente traerá Benedicto XVI.
“El Papa desea estrechar las manos de todos los mexicanos, ese es el mensaje, de paz”, comentó.
El Papamóvil, con dos banderas del Vaticano a los costados y placas SCV 1, inició el trayecto sobre la carretera León-Silao, hacia el bulevar Aeropuerto, escoltado por una caravana de vehículos oficiales.
El Papa, sentado en un sillón blanco, saluda y bendice a las personas que están presentes en el recorrido.
Con él viaja el arzobispo de León, José Guadalupe Martín Rábago, y su secretario personal, Georg Gaenswein.
Al entrar a la ciudad de León, el Papamóvil avanzará por el bulevar Adolfo López Mateos hasta llegar al bulevar Juan Alonso de Torres hasta donde enfilará rumbo al Colegio Miraflores, en la avenida López Sanabria.
