Reciben abuelitos al Papa en el Colegio Miraflores
Por: Evlyn Cervantes Silva.
María del Carmen Padrón y Enrique Buenrostro no se sintieron tan afortunados de ser adultos mayores como el día en el que les confirmaron que por su edad, podrán darle la bienvenida al Papa Benedicto XVI en el Colegio Miraflores.
El Colegio Miraflores privilegió a los adultos mayores para que sean ellos quienes reciban al Papa al ingresar a la que será su residencia durante su estancia en León, contó María del Carmen Padrón.
“A nosotros gracias a Dios nos tocó la fortuna de que a todos los adultos mayores vamos a estar aquí en el Miraflores, así es que vamos a verlo de cerquita, Dios Nuestro Señor nos dio esa dicha, para mí fue un regalo grandísimo porque yo tenía mucha tristeza porque pensé que a lo mejor no lo podía ver, pero fue una bendición”.
Dos gorras blancas y dos banderitas en colores blanco y amarillo, una para cada quien, así se preparan los esposos vecinos de la colonia Valle del Campestre, quienes ayer a su llegada a la parroquia de San Maximiliano Kolbe, desviaron su camino para comprar una imagen del Pontífice.
Fue desde la semana pasada, detalló Enrique Buenrostro, cuando se anotaron en su parroquia luego de que el padre lanzara la invitación al final de la misa, desde entonces, cuida con recelo su credencial de elector.
“El boleto es nuestra credencial de elector, ese va a ser nuestro boleto, como ya estamos anotados en la computadora desde el lunes pasado, ahorita si va usted y trae credencial de elector y aunque sea adulto de la tercera edad y que pertenezca a esta iglesia, no lo reciben, fue lo que nos dijo el padre, cuídenla porque con esto aquí no pueden mentirnos que si yo soy de acá o que tengo tantos años, no, aquí dice la verdad”, explicó don Enrique.
Los esposos aún desconocen a qué hora se tendrán que presentar en el Colegio Miraflores para darle la bienvenida al Papa debido a que en la parroquia de San Maximiliano a la que pertenecen, les informaron que será vía telefónica cuando se les indiquen las horas previas con las que deberán anticipar su llegada.
Ante el privilegio de estar cerca del Papa, Enrique Buenrostro cuenta que algunos de sus familiares son honestos con él y aseguran tenerle “envidia de la buena”.