Mérida viajó hasta Tijuana en su primer compromiso de la Copa. (Jam Media)
Aunque el deseo es finalizar su carrera deportiva con Cruz Azul, El argentino Christian “Chaco” Giménez no se siente seguro en la institución.
Si bien es cierto ha sido de los más regulares en los últimos años, reconoció que ha quedado a deber, porque no ha podido ayudar a que La Máquina acabe con la sequía de casi 15 años sin conseguir un campeonato.
“No he cumplido porque eso significaría el título”, comentó el mediocampista cementero, quien aún tiene un año y medio de contrato. “Creo que no es momento de hablar de renovación, eso se verá en cuando termine el acuerdo; sería cuestión de sentarme con la directiva y decirles ‘esto es lo que di’ y ‘esto es lo que puedo darles’ y ya será decisión de ellos si sigo”.
“Hay que darle tiempo al tiempo, me hicieron un contrato por cuatro años, y no es momento de hablar de eso. Yo no puedo exigir hablando sino con hechos, y hoy lo que más quiero es salir campeón, no pienso en lo que puede venir, sólo me concentro en el presente, en lo que podemos hacer ahora, aunque sí me gustaría seguir por mucho tiempo aquí”, insistió.
Le agrada el hecho de que el equipo tenga dos oportunidades de alcanzar una corona en el segundo semestre del año. La primera, el Apertura 2012, y la segunda el torneo de Copa. “No podemos dejar escapar ninguna de las opciones”, aseguró.
“Nosotros queremos ganar las dos, donde nos estamos jugando el prestigio. Cruz Azul, al ser un equipo grande, se juega el prestigio hasta en los amistosos, entonces no podemos dejar de escapar la posibilidad de ganar la Copa. Hay que ganar lo que se nos presente, y con esa mentalidad encaramos ambas competencias”.
Aunque se espera que los cementeros encaren el partido de mañana por la noche ante Neza con un cuadro plagado de suplentes, es alta la probabilidad de que “Chaco” tenga participación para que recupere el nivel que perdió, después de que fue operado de la rodilla izquierda el pasado mes de mayo.
“La rehabilitación ha sido más rápida de lo que esperaba, pero la verdad es que me desespero por no poder jugar. Sentí una emoción muy grande el sábado cuando entré porque también la afición gritó mi nombre, y por eso quiero estar listo lo antes posible. No estoy todavía al cien [por ciento], pero ni a mí ni a Memo Vázquez (director técnico) nos apura”, concluyó.
