John Van´t Schip sabe que no siempre tendrá paciencia por parte de Jorge Vergara. (Jam Media)
Se desentiende de la práctica irremediablemente. Imposible hacer caso omiso al llamado de Jorge Vergara. El técnico de Chivas, John van't Schip, se dirige a un costado del campo. Los asistentes Eduardo Fentanes y David Nascimento se encargan del entrenamiento. El holandés pasa minutos con el dueño del equipo.
La situación del Guadalajara no es óptima. El agua no ha llegado al cuello. Pero se acerca. Con dos puntos de 12 posibles, el Rebaño Sagrado atraviesa por una situación complicada. Y el estratega sabe que los resultados urgen. No se engaña; su puesto depende de ello.
"Ahora, en este nuevo ciclo de Chivas, todos saben dentro del club que es un período particular, porque cambian las cosas, pero al fin es normal, que se debe ganar, se debe jugar bien, tener más puntos que ahora.
Ahora, todos dentro del equipo saben que es un momento de paciencia, pero la paciencia no es para toda la vida, eso lo sé también", reconoce con sereno tono.
