Renovar Pemex, reto de reforma

La intención de llevar a cabo una reforma energética donde la primera parte de la misma incluya un cambio en la manera en que opera Petróleos Mexicanos (Pemex) es una constante en la manera en que piensan los políticos y ya se tiene al menos una tentativa de para cuando hacerla: la primavera de 2013.

Hay que pensar en un México y en una empresa diferente a como fue concebida en sus inicios. En palabras de Fluvio Ruiz, consejero profesional de la paraestatal, "es un Pemex postmoderno".

Se habla de hacer cambios constitucionales en los artículos 25, 27 y 28 e incluso desde la izquierda ya hay legisladores que piden se haga un cambio en la manera en que opera. "Fue una sorpresa que eso pasara", dijo el presidente de la Comisión de Energía de la Cámara de la Cámara de Diputados, Marcos Bernal, legislador por el PRI.

Dentro de la fracción del PRI se está pensando en las opciones que se tienen para que participe la iniciativa privada.

Por ejemplo, usar más las Asociaciones Público Privadas para dar mayor oportunidad de trato con empresarios.

Lo que es un hecho es que a los funcionarios que van de salida las explicaciones les sobran y ahora hasta los modelos.

A lo largo de la actual administración se hicieron varios intentos por acerca a Pemex a Petrobras, hubo intercambios y viajes de legisladores, incluso se importaron instituciones como la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH).

Hubo también coqueteos con Statoil de Noruega, de por allá llegó la idea de hacer un bono ciudadano que le permitiría a los mexicanos obtener una rentabilidad real de la operación de Pemex, esos temas salieron en la reforma de 2008.

Ahora, dice el secretario de Energía, Jordy Herrera, que el modelo de negocios que más le gusta a es el que se implementa en Saudi Aramco, la petrolera más grande del mundo con las reservas más importantes del orbe.

El modelo de Saudi Aramco le da al gobierno mayor capacidad de decisión que el de Petrobras y el de Statoil, con autogestión, sin un consejo de administración asambleísta y libertad de presupuesto.

"Necesitamos repensar si queremos que sea empresa o reflejo de los consensos del país. Hacen falta expertos que hayan firmado cheques, que tomen decisiones, que hayan hecho inversiones", dijo.

Lo que no quiere son encargados improvisados que no sepan qué decisiones tomar frente a una industria que está en caza todo el tiempo.

 ESCASEZ DE RECURSOS La verdad es que hasta ahora la Comisión Nacional de Hidrocarburos no tiene el dinero suficiente para poder cumplir con el mandato de ley de regular a la paraestatal mexicana que se las arregla consigo mismo y ahora se piensa que incluso lo hace a su conveniencia.

Este año la CNH debería haber recibido más de 300 millones de pesos como presupuesto para sus actividades pero la Secretaría de Hacienda solo le autorizó 90 millones, que es lo justo que se tenía previsto para 2012.

Hubo entregas de recursos a lo largo del año, se espera que en el mejor de los casos la Comisión obtenga 50% de lo que le corresponde, pero aún es una posibilidad.

Del bono ciudadano no se tiene ni sus luces. Juan José Suárez Coppel, director de Pemex, explica la razón: la empresa no está capitalizada y, en consecuencia, no se pueden emitir bonos ciudadanos.

En este Pemex "posmoderno" se habla de que se necesita un promedio de inversión de entre 350 y 400 mil millones de pesos anuales, en términos reales, por al menos los siguientes 10 a 15 años y además se necesitan tomar decisiones concretas sobre temas específicos, por ejemplo, que hacer con el shale gas.

La experiencia internacional en el shale gas es que lo explotan compañías pequeñas que luego se asocian con más grandes porque de otra manera los beneficios se diluyen. En el caso de México hay una sola compañía, una sola empresa que no puede explotar este tipo de yacimientos de esta manera.

Lo ideal, dicen en el actual gobierno, es que se haga una reforma legal que tome al shale gas como un recurso no convencional y que necesita un trato especial muy diferente al que en este momento se puede ofrecer.

En ese sentido, lo ideal es que fuera una compañía pequeña con capacidad de tomar decisiones rápidas la que se dedique a esta actividad.

Esta decisión se debe de tomar en cuenta en un contexto donde el escenario es mantener la producción de crudo en al menos 2.5 millones de barriles diarios de petróleo crudo y 6 mil millones de pies cúbicos de gas.

Jordy Herrera explicó que si se quiere aumentar esta producción, será necesario aumentar el monto de inversiones.

"Un ejemplo es el gas shale. Para explorarlo, sería necesario invertir adicionalmente entre 10 y 15 mil millones de pesos cada año", recursos que deberán provenir del erario, tal como están actualmente las cosas.

 'HAY QUE APROVECHAR LA RENTA PETROLERA' Llevar a cabo una reforma petrolera en los próximos seis meses o un año debe tener como propósito final la captura de la renta petrolera, saber qué se va a hacer con los recursos, a dónde se van a dirigir, pero sobre todo saber su destino.

Carlos Morales Gil, director de Pemex Exploración y Producción, es ingeniero petrolero de la UNAM, es de Coahuila, y es uno de los mayores expertos a nivel mundial, durante su gestión ha pasado de todo, lo mismo accidentes graves como el del centro procesador de gas en Reynosa o aciertos como los pozos Supremus o Trión.

En entrevista explica sus puntos de vista sobre la posible reforma: de entrada dice que lo importante es saber qué hacer con los recursos que se obtenga.

Depende de lo que vamos a hacer con los recursos que generemos, antes de decidir por cuál reforma petrolera van, deben establecer qué van a hacer, cuál es el escenario que puede generar mejores recursos financieros para el país.

"Yo no tengo duda de eso, la velocidad de la monetización puede crecer al doble" si se deciden por apoyar una reforma constitucional.

México nunca ha dejado de ser un foco de atención para la industria porque hay recursos, hay hidrocarburos, incluso, es más probable que afuera del país haya más interés que internamente con, por ejemplo, el nuevo sistema petrolero en aguas profundas.

Hay recursos y si para adentro del país pueden ser algo así como inciertos los recursos de 13 mil millones de la zona de Perdido para las petroleras no lo es porque saben que ahí pueden estar, indica.

Pero se requiere saber para qué se usa, hay que tener claro para qué se va a utilizar porque el país tiene muchas necesidades y necesita saber qué hacer.

"La más elemental (de las necesidades a cubrir), y la más obvia también, es la educación y si usamos esa educación para generar conocimiento o tecnología se justifica, si la usamos (la renta petrolera) para generar mayor actividad turística o construir infraestructura, está bien", manifestó el funcionario.

Todas esas son palancas de desarrollo que pueden ser muy favorables para México, el país puede dar un paso importante pero se necesita tener claro esa premisa de para qué es el dinero.

No podemos decir que se ha despilfarrado, creo que las inversiones que se han generado cada año, en los últimos seis años, es del orden de los 600 mil millones de pesos que es más o menos lo que Pemex ha aportado.

"Eso significa que si hemos convertido el petróleo en infraestructura y es un logro importante y hemos avanzado y no se detiene ahí el tema si queremos un crecimiento más acelerado, creo que se requiere eso, la reforma".

"Pero con la salvedad de tener estructuras regulatorias sólidas y la captura de la renta petrolera, hay que capturar el beneficio de los recursos, pero hay que tener la certeza de capturarla primero".

Por lo pronto la empresa no se detiene, si bien la reforma tardaría entre seis meses y un año, los planes en el corto plazo están moviéndose.

Es el caso de la perforación del pozo Maximino, que ya estará en marcha, luego de que se está terminando el taponamiento del pozo Supremus y luego vamos a Maximino y se va a cerrar el año con una incorporación de reservas.

"Esto estaría listo a finales de diciembre, que es cuando se cierra el ciclo normalmente y de Trion vamos a incorporar 500 millones de barriles y de Supremus unos 125 millones en 3p, esas son las reservas que dijimos", señaló.

Hay que recordar que lo importante es que estos pozos son los descubridores, que su valor es esencial para determinar la presencia de hidrocarburos en la zona y las posibles reservas de 13 mil millones de barriles.

Ya después, dice Morales Gil, con los pozos delimitadores lo que se da es la reserva probada "por eso es importante perforar los delimitadores para que se puedan delimitar las reservas, que pasen de 3p a reserva probada".

"La relevancia de Trión y Supremus es la identificación del sistema petrolero y es donde están las acumulaciones de los 13 mil millones de barriles y hay una mayor certidumbre de la que había antes de que se perforaran estos pozos", señaló.

Después de Maximinus se hizo Supremus y ese equipo se va a perforar que se deberá de empezar a perforar en unas tres semanas.